Los datos positivos presentados por MSD de su antiviral oral para el Covid-19, el molnupiravir, continúan dando grandes frutos y cada vez son más los países que ya confían en la píldora.
Ahora, Japón también se ha sumado a la lista de estos países y ha acordado pagar a MSD y a su socio Ridgeback Therapeutics 1.200 millones de dólares (1.048,6 millones de euros) por 1,6 millones de cursos del medicamento. Este nuevo acuerdo depende de que el antiviral obtenga una autorización o aprobación de la Agencia de Productos Farmacéuticos y Dispositivos Médicos de Japón.
El acuerdo se produce un día después de que MSD anunciara que el gobierno de los Estados Unidos ejercerá dos de sus opciones para comprar un total de 1,4 millones de cursos adicionales de molnupiravir, si el medicamento tiene una autorización de uso de emergencia (EUA) o la aprobación de la Agencia del Medicamento de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés), por aproximadamente 1.000 millones de dólares (864,36 millones de euros).
Con estas opciones ejercidas, el gobierno estadounidense se ha comprometido a comprar un total de aproximadamente 3,1 millones de cursos de molnupiravir, por aproximadamente 2.200 millones de dólares (1.901,49 millones de euros), entre la autorización y principios de 2022. El gobierno de Estados Unidos también tiene la capacidad de comprar más de dos millones de cursos adicionales a través de otras opciones que quedan en el contrato.
Este nuevo acuerdo depende de que el antiviral obtenga una autorización o aprobación de la Agencia de Productos Farmacéuticos y Dispositivos Médicos de Japón
A finales del pasado mes de octubre, Francia también ordenó la compra de 50.000 dosis de la píldora. De igual modo, Tailandia es uno de los países que está en conversaciones con MSD para comprar 200.000 ciclos de su píldora.
Asimismo, Taiwán y Malasia también han anunciado que están hablando con la compañía para comprar el tratamiento, mientras que Filipinas, que está realizando una prueba de la píldora, ha subrayado que espera que su estudio nacional permita el acceso al tratamiento.
Por su parte, Australia comprará 300.000 ciclos de la píldora antiviral de MSD y Corea del Sur se hará con 20.000. MSD también anunció el miércoles un acuerdo de suministro y compra con Singapur. Alemania también se ha sumado a las negociaciones con la compañía y ha anunciado que mantendrá conversaciones sobre si necesita realizar compras al por mayor del prometedor candidato a fármaco de MSD.
LA UE ESTUDIA UN POSIBLE ACUERDO
La Unión Europea también se ha pronunciado y podría considerar firmar un acuerdo de suministro con la farmacéutica estadounidense para su píldora experimental Covid-19, pero “solo después de que la compañía comience el proceso de aprobación de la píldora”
"En los próximos días estudiaremos la posibilidad de iniciar una revisión continua para este compuesto. Y, por supuesto, la idea es entender si los datos apoyan dicha revisión continua", señaló el jefe de Estrategia de Amenazas Sanitarias Biológicas y Vacunas de la EMA, Marco Cavaleri.
MSD también ha firmado un acuerdo de licencia voluntaria con el Fondo de Patentes de Medicamentos (MPP) para facilitar el acceso global asequible de molnupiravir.
Según los términos del acuerdo, MPP, a través de la licencia otorgada por MSD, será autorizado a otorgar licencias adicionales de sublicencias no exclusivas del tratamiento a los fabricantes ("Licencia MPP") y diversificar la base de fabricación para el suministro de productos de calidad garantizada o precalificados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) a países cubiertos por la licencia MPP.
USOS DEL MOLNUPIRAVIR
El molnupiravir actúa contra las variantes del coronavirus más agresivas. Según MSD, su píldora anticovid se ha mostrado efectiva en los ensayos contra las variantes más habituales y transmisibles actualmente, como la Delta, Gamma y Mu.
Y eso es, según la empresa farmacéutica, porque molnupiravir, no actúa contra la proteína de la espiga del virus, el objetivo de las vacunas, sino contra la polimerasa viral, una enzima necesaria para que el virus haga copias de sí mismo y actúa introduciendo errores en el código genético del virus.
Los datos de los ensayos también han revelado que esta píldora contra la Covid-19 es más eficaz cuando se administra en las primeras fases de la infección.