Concretamente, dos de sus exrepresentantes, han sido acusados de participar en pagos a médicos para conseguir la prescripción (innecesaria) de un fármaco formulado con fentanilo opioide, altamente adictivo, a pacientes que no padecen cáncer. Estos pagos habrían sido disfrazados a través de honorarios y supuestos eventos de Marketing.
Tanto Levine como Hill se enfrentan a un máximo de cinco años de prisión una vez que falle la sentencia de forma definitiva
De hecho, Natalie Levine, que trabajó en la sede de Arizona de 2013 a 2014, se ha declarado culpable en un tribunal federal en Hartford, Connecticut. Por su parte, Karen Hill, la que fuera directora de la región de Miami, también se ha declarado culpable en una corte federal en Mobile, Alabama.
En el caso de Levine, los fiscales aseguraron que usó un programa falso para pagar a una enfermera de Connecticut, a un asistente médico de New Hapshire, y a un médico de Rhode Island. En cambio, según documentos judiciales, Hill facilitó cohechos a través del mismo programas a dos médicos de Alabama y a otros profesionales sanitarios de Florida.
Ambas se enfrentan a un máximo de cinco años de prisión una vez que la sentencia falle de forma definitiva.
Desde Insys han informado que se encuentran trabajando para lograr un acuerdo con el Departamento de Justicia de los Estados Unidos dado que hay más personas implicadas que se enfrentan a distintos cargos.
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