Desde su descubrimiento y producción a gran escala, la insulina y la hormona de crecimiento han sido pilares fundamentales en el desarrollo de la biotecnología farmacéutica. Estas dos sustancias, obtenidas mediante técnicas de ADN recombinante, han permitido mejorar el tratamiento de enfermedades metabólicas y del crecimiento, marcando un antes y un después en la historia de la medicina.
La evolución de estas terapias ha estado impulsada por avances científicos y tecnológicos que han permitido no solo su producción más eficiente, sino también la mejora de sus propiedades farmacológicas. La insulina, clave en el tratamiento de la diabetes, y la hormona de crecimiento, utilizada en diversas patologías asociadas a déficits hormonales, son ejemplos de cómo la biotecnología ha transformado la industria farmacéutica y la atención médica.
El papel de las compañías biotecnológicas ha sido crucial en el desarrollo, producción y comercialización de estos medicamentos. Desde pioneras hasta empresas emergentes que han contribuido a la evolución de estas terapias, el sector ha experimentado una competencia intensa y una continua innovación. En este contexto, Genentech revolucionó la biotecnología en 1976 al desarrollar el uso de Escherichia coli modificada para producir proteínas humanas, permitiendo la fabricación segura y accesible de la hormona de crecimiento recombinante. Por otro lado, en 1982, Eli Lilly marcó otro avance con Humulin, la primera insulina humana obtenida por ADN recombinante, sustituyendo la insulina de origen animal y mejorando su disponibilidad y seguridad.
Sin embargo, una reciente investigación explica como el éxito de la insulina recombinante impulsó a otras compañías biotecnológicas a desarrollar variantes mejoradas del fármaco. Empresas como Novo Nordisk y Sanofi introdujeron versiones de acción rápida y prolongada, que optimizaron el control de la glucosa y mejoraron la calidad de vida de los pacientes diabéticos.
Merck desarrolla sus propias versiones, ampliando las opciones disponibles para los pacientes con déficits hormonales
Después del desarrollo inicial de la hormona de crecimiento recombinante, otras compañías farmacéuticas entraron en el mercado para mejorar su producción y acceso. De esta manera, desde Merck desarrolla sus propias versiones, ampliando las opciones disponibles para los pacientes con déficits hormonales.
El mercado de la hormona de crecimiento ha evolucionado significativamente con la llegada de biosimilares, que han reducido los costes y aumentado la competencia. Además, en los últimos años, el desarrollo de biosimilares ha sido una tendencia clave en la industria biotecnológica. Compañías como Biocon, Sandoz, Samsung Bioepis y Mylan han apostado por la producción de versiones más asequibles de insulina y hormona de crecimiento, generando una mayor competencia con los fabricantes originales.
El impacto de los biosimilares ha sido significativo, especialmente en mercados donde los altos costes de los fármacos biotecnológicos limitaban el acceso a los tratamientos. Estas compañías, con su insulina biosimilar aprobada por la FDA y la EMA, han demostrado que la biotecnología puede hacer que los tratamientos de enfermedades crónicas sean más accesibles.
En este sentido, la empresa danesa Novo Nordisk, una de las principales compañías farmacéuticas en el ámbito de la diabetes, ha estado a la vanguardia del desarrollo de insulinas de acción prolongada y tecnologías de administración más cómodas para los pacientes. Asimismo, con más de 100 años de experiencia en el tratamiento de la diabetes, ha centrado sus esfuerzos en mejorar tanto la eficacia de la insulina como la experiencia del usuario, reduciendo la cantidad de inyecciones necesarias y facilitando la adherencia al tratamiento. Una de las innovaciones más destacadas de Novo Nordisk es la insulina degludec, comercializada como Tresiba. Este análogo de insulina basal ha sido diseñado para proporcionar un control glucémico estable durante un período prolongado, con una duración de acción de hasta 42 horas y una menor variabilidad en comparación con otras insulinas basales como glargina y detemir.
Este análogo de insulina basal ha sido diseñado para proporcionar un control glucémico estable durante un período prolongado
Tresiba permite a los pacientes mayor flexibilidad en los horarios de administración, ya que su perfil de acción estable reduce el riesgo de hipoglucemias, uno de los efectos adversos más preocupantes en el tratamiento con insulina. Este beneficio es especialmente relevante para personas con diabetes tipo 1 y tipo 2 que requieren insulina basal para mantener niveles estables de glucosa en sangre a lo largo del día y la noche. Además de Tresiba, Novo Nordisk ha desarrollado Ryzodeg, una combinación de insulina degludec con insulina aspart, que ofrece tanto un control prolongado como una acción rápida para mejorar la regulación postprandial de la glucosa.
Por otro lado, Novo Nordisk ha sido pionera en la creación de plumas precargadas de insulina, dispositivos diseñados para facilitar la administración de la medicación de manera más cómoda, precisa y menos dolorosa en comparación con las jeringas tradicionales.
Uno de los modelos más avanzados es la FlexTouch, una pluma precargada que requiere menos fuerza para presionar el botón de inyección, lo que la hace más accesible para personas con problemas de movilidad en las manos, como los pacientes con artritis. Este tipo de plumas cuentan con dosis preajustadas y un diseño ergonómico que mejora la adherencia al tratamiento. Además, Novo Nordisk ha desarrollado plumas de insulina con memoria digital, que registran la cantidad y el momento de cada dosis administrada. Estas plumas digitales pueden conectarse a aplicaciones móviles y dispositivos de monitoreo de glucosa, permitiendo a los pacientes y médicos realizar un seguimiento más preciso del tratamiento.
A medida que avanza la investigación en terapias biotecnológicas, Novo Nordisk continúa explorando nuevas formas de mejorar la eficacia y la comodidad del tratamiento con insulina. Su enfoque en la optimización de formulaciones y dispositivos refleja su compromiso con la innovación en el manejo de la diabetes, con el objetivo de ofrecer soluciones que faciliten la adherencia al tratamiento y mejoren la calidad de vida de los pacientes.