La industria farmacéutica, gran impulsora de la I+D

La compañía estadounidense MSD, junto con Bristol Myers Squibb y GSK, ocupan las primeras posiciones del ránking de empresas que más han invertido en I+D

Industria farmacéutica (Foto. Freepik)
Industria farmacéutica (Foto. Freepik)
Salud35
30 octubre 2021 | 00:00 h

El sector farmacéutico siempre ha sido una industria donde la innovación ha jugado un papel clave, ya que es donde reside la mayor parte del negocio. Los grandes laboratorios a nivel internacional y nacional desembolsan anualmente millones de euros para intentar desarrollar nuevos fármacos jamás vistos antes en el mercado.

Prueba de ello es que, pese a la pandemia del coronavirus, la inversión de la industria farmacéutica en I+D aumentó en 2020 hasta alcanzar una cifra récord: 39.000 millones de euros.

Así lo recoge el último informe publicado por la Federación Europea de Asociaciones de la Industria Farmacéutica (Efpia, por sus siglas en inglés) que muestra que las compañías farmacéuticas innovadoras conforman el sector industrial más intensivo en I+D en el continente europeo. Además, según los datos, el sector empleó directamente a unas 830.000 personas.

La compañía estadounidense MSD, junto con Bristol Myers Squibb y GSK, ocupan las primeras posiciones del ránking de empresas que más han invertido en I+D durante el pasado año. Concretamente, MSD con 11.717 millones de euros, Bristol Myers Squibb con 9.597 millones y GSK con 6.633 millones.

Asimismo, este sector produce por valor de 310.000 millones de euros, su cifra de exportación ya alcanza los 515.000 millones y aporta casi 122.000 millones de euros a la balanza comercial de la Unión Europea de los 28, la más alta generada con respecto a todos los sectores basados en la investigación.

AVANCES EN INVESTIGACIÓN BIOMÉDICA

Del mismo modo, los avances en la investigación biomédica han provocado reducciones de los índices de mortalidad en enfermedades tan graves como el VIH, sida o algunos tipos de cánceres y han proporcionado en general una mejor calidad de vida.

La compañía estadounidense MSD, junto con Bristol Myers Squibb y GSK, ocupan las primeras posiciones del ránking de empresas que más han invertido en I+D durante el pasado año

Sin embargo, y además de obstáculos regulatorios adicionales y del aumento de los costes de la I+D, las compañías se han visto "directamente afectadas" por las medidas de "austeridad fiscal" introducidas por gran parte de los estados miembro desde 2010.

 Otro reto al que se enfrenta el sector es el "rápido" crecimiento, a nivel de mercado y en el terreno de la investigación, de economías emergentes como Brasil, China e India, lo que está conllevando una paulatina migración de actividades económicas y de I+D desde la Unión Europea hacia estos mercados.

Y es que, según el informe 'Midas' elaborado por Iqvia, entre 2015 y 2020, los mercados brasileño, chino e indio crecieron un 11,3%, un 4,8% y un 10% respectivamente, en comparación con el crecimiento medio del 5% marcado por los cinco primeros países de la UE y el 4,9% de Estados Unidos.

También el potencial europeo está sufriendo un detrimento en comparación con el mercado norteamericano, que en 2020 representó el 49% de las ventas farmacéuticas mundiales frente al 23,9% de Europa. A esto se suma que el 63,7% de las ventas de nuevos medicamentos lanzados durante el periodo 2015-2020 se registraron en el mercado estadounidense, frente al 17,4% de los cinco principales mercados europeos.

IMPACTO DE LA PANDEMIA COVID-19

Precisamente, la industria farmacéutica ha manifestado sus dudas a propósito de algunas de las medidas que se apuntan para el desarrollo de la Estrategia Farmacéutica Europea, como la reducción de incentivos a la I+D, y está proponiendo un Foro de Alto Nivel en el que, junto a los responsables comunitarios, también participen comunidad científica, pacientes e industria, de modo que enriquezcan la visión para asegurar que la Estrategia crea el marco más adecuado para el impulso a la investigación, producción y acceso a los medicamentos en la región.

En este sentido, el impacto de la pandemia provocada por la Covid-19 ha evidenciado el vínculo entre salud y prosperidad económica y social. En respuesta a la crisis, la industria farmacéutica ha demostrado su capacidad de innovación, logrando en menos de un año tener disponibles varias vacunas seguras y efectivas, y la resistencia de la cadena de suministro global de medicamentos, como quedó reflejado en los meses más duros de la pandemia.

Por lo tanto, se trata de un sector llamado a desempeñar (en los próximos meses y años) un papel clave en el impulso de la recuperación de Europa, el desarrollo de la resiliencia en el continente y el crecimiento futuro, a la vez que se asegura un acceso más rápido y equitativo a los medicamentos para los pacientes europeos.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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