La industria farmacéutica se ha resistido en los últimos años a desarrollar nuevos medicamentos para aliviar el dolor yla adicción. Este panorama lo refleja la Organización de Innovación en Biotecnología (BIO) en un nuevo informe sobre la escasez de medicamentos y el aumento evidente de la demanda.
En cifras, la cantidad de programas de ensayos clínicos en curso para analgésicos se redujo en un 44%, de 220 en 2017 a 124 en 2022. Los medicamentos que llegan a la clínica enfrentan probabilidades abrumadoras y en cierta medida de aquí surge el miedo de adentrarse en su desarrollo. Solo el 0,7% de los nuevos analgésicos pasaron de la fase 1 a la aprobación, comparado con una tasa general del 6,5% para las terapias en todas las áreas de la enfermedad.
En el apartado del dolor sí que se encuentran pequeños brotes verdes por los avances científicos en varios fármacos innovadores contra las migrañas, que incluso han llegado a ser aprobados. Sin embargo, en el resto de tipos de dolor todavía se encuentran estancados y no han conseguido ninguna aprobación.
Uno de los países más afectados por este tipo de medicamentos y su posterior adicción es Estados unidos con la crisis de los opioides y opiáceos. Esta, hace referencia al aumento de drogadictos y muertes asociadas al uso excesivo de analgésicos que pueden llegar a crear una gran dependencia y adicción.
Reconstruir el panorama de innovación del dolor y la adicción podría salvar miles de vidas estadounidenses y mejorar millones más
Según datos del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), entre 1999 y 2019 casi 500.000 personas murieron a causa de una sobredosis relacionada con algún opioide y en la época de pandemia se vivió la cuarta ola de fallecimientos y el empeoramiento total del consumo. Como principal solución se postulan los tratamientos farmacológicos para intentar revertir la situación, pero el problema llega cuando estos no consiguen ni comercializarse. Si bien la cantidad de terapias aumentó de 29 en 2017 a 39 ahora, la tasa de fracaso de la fase 2 fue del 93% en los últimos cinco años.
El informe señala directamente a la financiación como principal causa de falta de desarrollo de medicamentos. Solo el 1,3% de los dólares de capital de riesgo, o 228 millones de dólares (208.485.728 euros), se destinó a empresas centradas en el dolor y las adicciones en 2021. Mientras tanto, las empresas de oncología recaudaron 9.700 millones de dólares (8.869.787.648 euros).
"Abordar esta necesidad insatisfecha requerirá una mayor inversión pública y privada. Reconstruir el panorama de innovación del dolor y la adicción podría salvar miles de vidas estadounidenses y mejorar millones más", apuntó Rachel King, directora ejecutiva interina de BIO.
Como principales soluciones, BIO recomienda un entorno regulatorio sólido para que las empresas que forman la industria farmacéutica vean como una oportunidad de negocio los medicamentos para el dolor y la adicción.