Los implantes mamarios de Allergan llevan ya varios años en el punto de mira de las autoridades sanitarias.
En julio del pasado año, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) inició una campaña para facilitar a las mujeres portadoras de implantes de mama Biocell, la reclamación de una indemnización contra la compañía por los daños físicos y morales ocasionados. La OCU le pidió a la empresa, hasta en tres ocasiones, que se hiciese cargo del daño producido, y tras no recibir respuesta, ahora, ha interpuesto una querella contra ella.
Este miércoles, la Organización anunció que ha decidido iniciar la acción judicial mediante la presentación de unas diligencias preliminares a fin de que Allergan remita la documentación técnica que obra en su poder en relación con las prótesis objeto de reclamación, así como copia de la póliza de responsabilidad civil, incluyendo las condiciones generales y particulares, que dé aseguramiento a este siniestro.
La OCU ha recordado que la indemnización pretende resarcir, por una parte, a aquellas mujeres que lamentablemente hayan desarrollado linfoma anaplásico de células grandes (LACG), pero también, a aquellas mujeres que, no habiendo desarrollado la citada enfermedad, sufren un daño moral por la amenaza y la preocupación que supone el riesgo a padecer la misma. Asimismo, se pueden reclamar los gastos de retirada del implante defectuoso en aquellos casos dónde la paciente haya decidido o decida optar por esta opción.
Esta semana, la OCU anunció que ha emprendido acciones judiciales contra Allergan por daños ocasionados por sus prótesis mamarias
OCU ha advertido de que esta acción judicial prescribía el 19 de diciembre de 2021, tres años a contar desde el 19 de diciembre de 2018, fecha en la que la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) anunció la retirada de estas prótesis del mercado español, si bien, la Organización ha interrumpido el plazo de prescripción para todas sus asociadas, lo que significa que todas las socias de OCU interesadas pueden aún unirse a esta acción.
En noviembre de 2021, la compañía recibió su primera condena en España por sus prótesis mamarias “defectuosas” asociadas a linfoma anaplásico de células grandes.
Allergan tuvo que abonar a una joven gaditana 38.120,42 euros como indemnización de daños y perjuicios por las secuelas físicas y psicológicas padecidas como consecuencia de la implantación de unas prótesis mamarias fabricadas por esta compañía, en concreto las rugosas texturizadas.
Esta fue la primera sentencia condenatoria contra Allergan en nuestro país, que en 2018 retiró voluntariamente del mercado sus prótesis de textura rugosa ante la posible asociación de su uso con la aparición en sus portadoras de un tipo de cáncer linfático muy poco frecuente, conocido como linfoma anaplásico de células grandes (LACG), y un año después, anunció la retirada de sus implantes a nivel mundial.
La sentencia obedeció a la demanda de una mujer que en 2008, con 20 años, se sometió en Cádiz a una operación para mejorar su estética mamaria con la implantación de unas prótesis texturadas brasileñas de la marca Silimed. En 2016, se le extrajo la prótesis mamaria derecha y se le sustituyó por otra de la marca Allergan.
Cuatro años después se detectó en esta mama un linfoma de células grandes anaplásico, tras lo que le fue extirpado el implante y tuvo que recibir un tratamiento de radioterapia.
481 CASOS ATRIBUIDOS A LOS IMPLANTES DE ALLERGAN
Desde la retirada de los implantes de Allergan, en todo el mundo, se han notificado 573 casos y 33 muertes por ese tipo de cáncer, y 481 de los casos se han atribuido claramente a los implantes de Allergan, según informó en su momento la Agencia del Medicamento de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés).
Precisamente, según aseguró el regulador estadounidense, de las 33 muertes, el tipo de implante era conocido en 13 casos, y en 12 de esos casos fue fabricado por Allergan.