La biotecnológica belga, Galapagos Health, se ha caracterizado por no tener miedo a reestructurar sus instalaciones y su fuerza laboral para afrontar el futuro. Precisamente, en 2022, se centraron en las terapias CAR-T, abandonando sus programas de enfermedad renal y fibrosis, además del despido de 200 empleados.
Ahora, en el inicio de 2024, la compañía ha vuelto a anunciar nuevos despidos para “simplificar las operaciones”. En concreto, el informe de ganancias de Galapagos recoge que será un total de 100 despidos. Además, aprovechó este documento para comunicar la decisión de detener el estudio del candidato CD19 CAR-T dirigido al lupus eritematoso sistémico refractario.
Sin embargo no todo son malos resultados para Galapagos, que informó que se habían logrado “mayores avances” en la preparación para lanzar un estudio de fase 1b de la terapia CAR-T, denominada GLPG5101, en pacientes con lupus eritematoso sistémico refractario.
"Seguiremos aprovechando las oportunidades de desarrollo empresarial e invirtiendo en nuestra cartera para generar valor para todas nuestras partes interesadas"
En esta misma línea, la biotecnología también ha estado probando GLPG5101 en pacientes con linfoma no Hodgkin en recaída o refractario. En la reunión general de la Sociedad Estadounidense de Hematología en diciembre, compartió los primeros datos de los ensayos de fase 1 y 2 de la terapia CAR-T, afirmando que el "perfil de seguridad es alentador" y los datos iniciales de eficacia mostraban "el potencial de nuestra terapia".
De cara a futuros movimientos, la empresa inició el nuevo año con 3.700 millones de euros, según apunta el director financiero y director de operaciones, Thad Huston, en la publicación de resultados. "Seguiremos aprovechando las oportunidades de desarrollo empresarial e invirtiendo en nuestra cartera para generar valor para todas nuestras partes interesadas", concluyó Huston.