Una vez más, un grupo de consumidores junto con la organización de defensa de salud pública US PIRG Education Fund están presionando a McDonald’s para que ahora también elimine el uso rutinario de antibióticos en sus productos de cerdo y de ternera ya que "su uso supone una grave amenaza para la salud de los humanos".
Esta exigencia es la última de una amplia campaña de la Organización Mundial de la Salud (OMS), inversionistas y grupos de defensa, entre otros, para presionar a los agricultores a que eliminen el uso de los antibióticos en los animales para así poder salvar los alimentos.
"Si no actuamos ahora para preservar la efectividad de los antibióticos, enfrentaremos un mundo en el que las infecciones comunes vuelven a matar", ha apostillado Matthew Wellington, director del programa de antibióticos de US PIRG Education Fund.
Cada vez es mayor el número de pacientes que sufren infecciones resistentes a múltiples medicamentos y que son difíciles de tratar debido a las opciones limitadas de antibióticos
En este mismo sentido, Afrah Sait, doctora e investigadora de enfermedades infecciosas en Tufts Medical Center, ha destacado que cada vez es mayor el número de pacientes que sufren infecciones resistentes a múltiples medicamentos y que son difíciles de tratar debido a las opciones limitadas de antibióticos.
"Para evitar que las bacterias se vuelvan resistentes y garantizar que nuestros antibióticos sigan siendo efectivos para los pacientes que los necesitan es fundamental que todos nosotros consideremos cuidadosamente cuándo y cómo se usan los antibióticos y que los empleemos solo cuando sea absolutamente necesario para salvar vidas", ha insistido la doctora.
Así, como parte del lanzamiento de la campaña nacional, US PIRG Education Fund ha comenzado a recaudar firmas en una petición que insta a McDonald's a tomar medidas en sus cadenas de suministro de ternera y cerdo. Casi 10.000 personas ya se han registrado para recibir soporte.
CONCIENCIACIÓN
Además, los afiliados estatales del grupo también han realizado eventos frente a las franquicias de McDonald's en todo el país estadounidense para informar a las personas sobre los peligros de las bacterias resistentes a los antibióticos y el importante papel que McDonald's puede desempeñar.
Por su parte, McDonald’s anunció el pasado mes de agosto que a partir de este año comenzaría a reducir a escala mundial el uso de antibióticos en sus productos de pollo y empezaría a trabajar en planes de antibióticos para otras carnes como la de cerdo o ternera.
Una decisión similar fue tomada por la compañía para el mercado estadounidense en 2016 y se aplica a medicamentos que también son utilizados en la medicina humana conocidos como Antimicrobianos de Alta Prioridad (HPCIA) por la OMS.
"Hemos convencido a McDonald's para que deje de servir pollo criado con medicamentos que salvan vidas", ha señalado Wellington, quién ha insistido en que "ahora es hora de que la cadena de hamburguesas haga el mismo compromiso con toda la carne que venden".