El conglomerado de atención médica CVS Health ha anunciado el despido de unos 2.900 empleados, lo que representa menos del 1% de su fuerza laboral total. Según informa Reuters, la compañía ha señalado que estas reducciones afectarán principalmente a roles corporativos. Esto implica que el cese de trabajadores no impactará a los empleados de primera línea en tiendas, o centros de distribución. Como explica la compañía, el objetivo de esta estrategia es reducir costes y optimizar su operación.
A través de este recorte, llevan a cabo su plan plurianual que CVS dio a conocer previamente, con el objetivo de ahorrar 2.000 millones de dólares (1.807 millones de euros) a través de la racionalización de operaciones y el uso de inteligencia artificial (IA) y automatización en varias áreas de su negocio. En el pasado 2022, la empresa ya había eliminado unos 5.000 puestos que no implicaban atención directa al cliente como parte de su estrategia de reestructuración.
Además de los despidos, CVS está explorando una posible división de la compañía que podría separar sus unidades minoristas y de seguros. Esta medida, aun en fase de estudio, se estaría evaluando bajo la presión de los inversores, quienes buscan mejoras en el desempeño de la empresa.
"La compañía está operando muy por debajo de su potencial y ha fallado en su enfoque de inversión"
El lunes, Reuters informó en exclusiva sobre las opciones que CVS está considerando, lo que incluye conversaciones con Glenview Capital Management, una firma de inversiones enfocada en el sector sanitario. Glenview confirmó que está manteniendo conversaciones "constructivas" con CVS para mejorar su rendimiento operativo, aunque aclaró que no está presionando para una división de la empresa.
"La compañía está operando muy por debajo de su potencial y ha fallado en su enfoque de inversión y actuarial en los últimos años, creando pérdidas económicas y volatilidad que presionan a su gente, sus clientes y sus accionistas", afirma Glenview en un comunicado.
CVS, que ha experimentado una creciente presión en el competitivo sector sanitario, busca revertir esta tendencia mediante su plan de ahorro y eficiencia. Con estos despidos y posibles cambios estratégicos, la compañía pretende optimizar sus operaciones sin afectar la atención al cliente ni los servicios críticos que ofrece.
Los recortes de personal y las posibles divisiones estratégicas se encuentran en el punto de mira de los accionistas y analistas, ya que la compañía trata de equilibrar las expectativas del mercado con su modelo de negocio diversificado en un sector cada vez más exigente.