La compañía norteamericana Moderna ha sido la elegida por el Gobierno de Estados Unidos para avanzar en el desarrollo de una vacuna contra la gripe aviar. Con una dotación de 176 millones de dólares (163,84 millones de euros), la administración de Joe Biden trata de poner freno al brote del virus H5N1 entre bovinos, que además ha infectado a tres trabajadores de la industria lechera desde el pasado mes de marzo.
Según recoge Reuters, los fondos se utilizarán para completar la última etapa de desarrollo y prueba de una vacuna prepandémica basada en la tecnología ARNm contra la gripe aviar. Además, el acuerdo incluye opciones adicionales para preparar y acelerar una respuesta a futuras amenazas a la salud pública.
Desde el primer aviso del gobierno a mediados de marzo, la patología afecta a más de 130 rebaños repartidos en doce estados. Por parte de los expertos, se muestran preocupados ante la opción de que la exposición del virus en las explotaciones avícolas y lechera pueda aumentar el riesgo de que el virus mute y adquiera la capacidad de propagarse fácilmente entre las personas.
"La tecnología de la vacuna de ARNm ofrece ventajas en eficacia, velocidad de desarrollo y producción, y escalabilidad para abordar brotes de enfermedades infecciosas"
Ya en 2023, Moderna inició un estudio de seguridad de su vacuna contra la gripe aviar, conocida como mRNA.1018 en adultos de 18 años o más. Una investigación que incluyó tanto el subtipo H5 de gripe como el H7 y se espera que sus resultados estén disponibles a lo largo de este año.
"La tecnología de la vacuna de ARNm ofrece ventajas en eficacia, velocidad de desarrollo y producción, y escalabilidad para abordar brotes de enfermedades infecciosas, como se demostró durante la pandemia de Covid-19", apuntó el director ejecutivo de Moderna, Stephane Bancel, en un comunicado.
La fabricación de vacunas contra la gripe convencional, utilizando tecnología basada en células, puede llevar entre cuatro y seis meses. En este sentido, los funcionarios estadounidenses han comunicado que están trasladando la vacuna a granel de CSL Seqirus, que se asemeja mucho al actual virus, a inyecciones terminadas que podrían proporcionar 4,8 millones de dosis si fuera necesario.