La farmacéutica estadounidense Clovis Oncology ha aprovechado una sesión de presentación de valores para comentar el posible final de la compañía en un futuro no muy lejano. “No tendremos suficiente liquidez para mantener nuestras operaciones más allá de enero de 2023”, señalaron.
Entre las razones de esta caída resaltaron la dificultad para recaudar dinero, los desafíos que han tenido que afrontar con su medicamento contra el cáncer Rubraca y el análisis de la Agencia del Medicamento de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) sobre toda la clase de inhibidores de las enzimas PARP.
En el apartado financiero, la compañía despidió el lunes a 115 empleados en los EE. UU con el objetivo de ahorrar costes, pero los aproximadamente 29 millones de dólares (29.020.314 eruos) no se realizarán por completo hasta el próximo año. Además, han perdido un pago de intereses de 1.9 millones de dólares (1.902.282 euros) y se encuentran en conversaciones con Pfizer para retrasar los pagos de regalías vinculados a Rubraca.
No tendremos suficiente liquidez para mantener nuestras operaciones más allá de enero de 2023
Con la idea de revertir esta desalentadora situación, el pasado mes de septiembre la farmacéutica decidió abrir el mercado de su medicamento Rubraca para el uso como terapia de mantenimiento de primera línea para el cáncer de ovario después de una respuesta inicial a la quimioterapia. La FDA recomendó esperar a datos más maduros sobre la supervivencia de los pacientes del ensayo de fase 3 Athena-Mono, una idea que Clovis Oncology no se pudo casi ni planear debido al tiempo que tardaría.
En la actualidad, gran parte de los ingresos de Rubraca provienen de la indicación de segunda línea, y un revés allí podría causar un impacto significativo en la línea superior de Clovis, advirtió la compañía. Incluso sin una restricción formal de la FDA, Rubraca ya está en declive continuo, durante el tercer trimestre, el medicamento vendió solo 30,7 millones de dólares (30.736.884 euros), muy por debajo de los 32,1 millones de dólares (32.138.566 euros) que registró en el segundo trimestre, que ya venían de una disminución desde los 34,2 millones de dólares (34.241.088 euros) en los primeros tres meses de este año.
Ante este panorama, la farmacéutica estadounidense está explorando asociaciones estratégicas o acuerdos de licencia, sobre un posible acuerdo para Rubraca fuera de EE. UU, la venta de su candidato a radioterapia FAP-2286 o directamente declararse en bancarrota.