Los despidos forman parte de cualquier empresa del mundo, y, como no podía ser de otra manera, en el caso de las biotecnológicas es una práctica recurrente. Según apunta Fierce Biotech el segundo trimestre en este sector ha registrado un total de 38 rondas de despidos, frente a los 36 del mismo periodo en 2023, una cifra que mantiene la tendencia de los últimos años, con 30 en 2022.
Sin embargo, a la hora de compararlo con el primer trimestre de este 2024 sí que se observa una diferencia clara. En esa época se produjeron 57 rondas de despidos, una cifra supone un incremento del 50% en comparación al 2022. A pesar de disminuir la cantidad en este segundo trimestre, todo apunta a que en todo el año superarán a los despidos contabilizados en 2023.
El segundo trimestre en este sector ha registrado un total de 38 rondas de despidos, frente a los 36 del mismo periodo en 2023, una cifra que mantiene la tendencia de los últimos años, con 30 en 2022
En cuanto al número total de empleados afectados, este es complicado de conocer, ya que muchas de las compañías confirman que llevarán a cabo una ronda de despidos pero no especifican la cantidad de puestos que desecharán. Aún así, en el segundo trimestre despidieron a 7.616 trabajadores del sector biotecnológico, una cifra que sorprende en comparación a los 2.398 del trimestre anterior. Es decir, hubo menos más empleados afectados en un menor número de rondas de despidos en abril, mayo y junio de 2024.
Entre los despidos más llamativos destaca Akari Therapeutics, una compañía biofarmacéutica en etapa clínica que rescindió de dos tercios de su personal; y Amylyx, que redujo el 70% de su plantilla después de que el fármaco para la esclerosis lateral amiotrófica Relyvrio fracasara en abril y fuera retirado del mercado.
En este segundo trimestre mayo ha sido el mes con más despidos, con un total de 20 rondas, seguido de las 12 rondas de abril y solo seis en junio. Evidentemente los casos más relevantes en torno a los despidos vienen de las grandes compañías que forman la industria, como es el caso de Pfizer, que tras no conseguir adaptarse a la época post-covid ha tenido que ir reduciendo gastos, y, como consecuencia, puestos de trabajo.