Los ensayos clínicos de las vacunas contra el cáncer de la compañía BioNTech deberían comenzar este año en Gran Bretaña, lo que marca un paso importante hacia su posible venta en el mercado abierto, según ha anunciado el máximo ejecutivo de la compañía alemana, Ugur Sahin, en declaraciones a la revista Der Spiegel.
BioNTech, conocida por su vacuna contra la COVID-19 con el socio estadounidense Pfizer, está sopesando en la actualidad en qué tipos de tumores quiere probar sus inmunoterapias personalizadas contra el cáncer y los lugares donde realizará los ensayos, ha añadido Sahin.
"Creemos que esto debería ser posible para una gran cantidad de pacientes antes de 2030"
Según explica la agencia de noticias Reuters, la compañía quiere que estas terapias, que se basan en tecnología de ARN mensajero (ARNm) similar a la que sustenta su vacuna contra la COVID-19, pronto se conviertan en un tratamiento habitual para los pacientes con cáncer.
"Creemos que esto debería ser posible para una gran cantidad de pacientes antes de 2030", dijo Sahin. No en vano, ha precisado el máximo ejecutivo de BioNTech, la tecnología para este tipo de terapia ha recorrido un largo camino.
"En 2014 necesitábamos de tres a seis meses para crear una vacuna individualizada contra el cáncer, ahora necesitamos de cuatro a seis semanas. Nuestro objetivo es que sea mucho menos de cuatro semanas", ha sentenciado Ugur Sahin.