Tras un 2023 caótico para Bayer, donde ha tenido que afrontar numerosos golpes, la compañía se encontraba ante una posible escisión. Esto significaría que la farmacéutica se dividiría en dos o más partes independientes, cada una con su propio negocio y sus propios accionistas.
Si bien es cierto que esta decisión, según algunos inversores, podría aumentar las acciones que cayeron en picado el pasado año, el sindicato alemán IG BCE tiene otras prioridades. Este grupo, que representa a los trabajadores de la compañía en el país, afirma que una división podría poner en peligro a la propia empresa. Asimismo, teme que una escisión traiga despidos, recortes salariales o traslados de empleos a otros países.
Una división podría poner en peligro a los trabajadores y a la propia compañía
Michael Vassiliadis, líder del sindicato IG BCE, declaró a Reuters que "para nosotros se trata de mantener unida a Bayer". Ante esta afirmación, Bill Anderson, el nuevo presidente ejecutivo de Bayer, ha aclarado que está evaluando todas las opciones por el bien de la compañía, pero que aún no se ha tomado ninguna decisión.
La compañía farmacéutica Bayer necesita revitalizarse tras lo ocurrido en el último trimestre del 2023. La empresa farmacéutica ha tenido que afrontar la caída en sus acciones, que solo en el mes de noviembre descendieron un 20%. El motivo se debe no solo de los malos resultados judiciales, sino también a que la compañía tuvo que poner el punto y final a uno de sus ensayos clínicos más promotores.
Por todo ello, la compañía busca “rediseñar Bayer” debido a la presión de sus inversores, mientras se encuentran a la espera de los resultados de futuros juicios que podrían determinar su rumbo. Con esta reestructuración, la farmacéutica espera conseguir reducir los costes, pero para ello planea la eliminación de niveles de gestión y coordinación. Esta decisión conllevará el despido de decenas de trabajadores, tanto fuera como dentro de Alemania.
Desde el sindicato, Vassiliadis dijo que actualmente se estaban discutiendo los planes del director ejecutivo Bill Anderson sobre la nueva estructura administrativa. El sindicato aún no está convencido de una reducción de los puestos directivos intermedios en Bayer, concluyó.