La compañía AstraZeneca está creando una división separada para vacunas y terapias con anticuerpos para centrarse en su vacuna y tratamientos contra la COVID-19.
La agencia de noticias Reuters informó el pasado mes de julio que la compañía estaba explorando opciones para su negocio de vacunas y esperaba tener una mayor claridad al respecto para finales de este año.
La nueva división, tal y como ha informado ahora la agencia de noticias, estará dirigida por el vicepresidente ejecutivo de Europa y Canadá, Iskra Reic, y combinará investigación y desarrollo, fabricación, así como equipos comerciales y médicos.
"El equipo se dedicará a nuestra vacuna COVID-19, nuestra combinación de anticuerpos de acción prolongada y nuestra vacuna de desarrollo que abordan múltiples variantes de preocupación, así como a nuestra cartera existente para enfermedades virales respiratorias", han señalado desde la compañía.
La nueva división estará dirigida por el vicepresidente ejecutivo de Europa y Canadá, Iskra Reic, y combinará investigación y desarrollo, fabricación, así como equipos comerciales y médicos
Los problemas de producción obligaron a la compañía a recortar las entregas de vacunas a la Unión Europea, lo que llevó a lanzar un desafío legal que ya ha sido resuelto.
Los gobiernos también han restringido su uso entre ciertos grupos de edad debido a los vínculos con coágulos de sangre raros. Los reguladores, incluida la Organización Mundial de la Salud (OMS), han dicho, sin embargo, que los beneficios generales de la vacuna superan cualquier riesgo.
La solicitud de AstraZeneca para la aprobación estadounidense de su inyección también está tardando más de lo esperado.
Pero los resultados positivos de los ensayos de su cóctel de anticuerpos como inyección preventiva contra COVID-19 le han dado a AstraZeneca un gran impulso, posicionándola potencialmente como proveedor tanto de vacunas como de tratamientos COVID-19. Actualmente, los reguladores europeos están revisando su tratamiento con anticuerpos.