El gigante del comercio electrónico Amazon está probando su equipo de primera línea en Gran Bretaña para detectar variantes del coronavirus y así proporcionar los datos a las autoridades de salud pública, incluso en puntos críticos.
La compañía ya abrió laboratorios de pruebas de COVID-19 en Reino Unido y Estados Unidos el año pasado para proporcionar pruebas voluntarias para su equipo y ahora, también pretende probar variantes en Gran Bretaña, donde los científicos fueron pioneros en la secuenciación de genomas.
Y es que la 'variante Delta' que se encontró por primera vez en la India se ha extendido, incluso en áreas donde Amazon tiene su laboratorio y algunos centros de suministro.
Las pruebas de Amazon están disponibles para alrededor de 30.000 empleados de primera línea en Gran Bretaña que trabajan en almacenes y logística
Luke Meredith, director del Laboratorio de Diagnóstico de Amazon en Gran Bretaña, ha señalado que la compañía está abierta a ofrecer el mismo servicio en Estados Unidos y "no descarta que su programa de pruebas esté disponible para el público británico en el futuro".
“Es muy importante reconocer el hecho de que las cepas pueden propagarse de diferentes maneras, tener diferentes respuestas a las vacunas, pueden tener diferentes impactos en la salud de las personas”, ha declarado a Reuters Meredith.
Las pruebas de Amazon están disponibles para alrededor de 30.000 empleados de primera línea en Gran Bretaña que trabajan en almacenes y logística. El laboratorio británico ha procesado más de 900.000 pruebas desde su apertura en septiembre, incluso desde sus instalaciones en Europa.