Los grandes almacenes como Kroger, Target y Walmart luchan por ganar terreno en el sector salud y cada vez son más fuertes como proveedores de salud en Estados Unidos.
Un claro ejemplo es el de Walmart que, con más de 4.700 tiendas repartidas por todo el país estadounidense, ahora ha optado por expandir su negocio de atención sanitaria con Care Clinic.
Concretamente, los servicios que ofrecen las Care Clinic del gigante minorista van desde atención primaria y odontología hasta laboratorios y radiografías, optometría, audición, fitness y nutrición, seguro médico y afiliación. Todo ello a precios asequibles, con o sin seguro.
Esto ha consolidado a Walmart en la posición ideal para convertirse en uno de los mayores proveedores de atención primaria de Estados Unidos y así ganar más presencia en el negocio del sector salud.
Los servicios que ofrecen las Care Clinic de Walmart van desde atención primaria y odontología hasta laboratorios y radiografías, optometría, audición, fitness y nutrición, seguro médico y afiliación
A finales del pasado año, el gigante minorista anunció una asociación con Epic para utilizar su servicio de historiales médicos electrónicos (RME) en sus centros sanitarios a partir de este año. De cara al futuro, Walmart está planeando ampliar su oferta de servicios sanitarios a otros sectores como la atención virtual y la telesalud. De igual modo, Walmart también lanzó una marca privada de insulina y adquirió el proveedor de telesalud MeMD el pasado verano.
La compañía abrió por primera vez clínicas de salud en la tienda en 2019, y su director ejecutivo Doug McMillon espera que el minorista pueda desempeñar un papel en la conexión de los consumidores con la atención médica en todo el mundo.
Pese a su estrategia de expansión y de servicios en la Sanidad estadounidense, Walmart también ha sufrido la crisis originada por la pandemia de la Covid-19. Así las bajas ocasionadas por Ómicron han costado a la compañía más de 400 millones de dólares en su cuarto trimestre. Cifra que se sitúa muy por encima de su previsión, que era de 100 millones.
Mientras este tipo de comercios minoristas han visto en la atención sanitario un filón para seguir creciendo a nivel empresarial en EE.UU., su modelo es todavía un reto para su expansión fuera del país, donde los modelos de asistencia sanitaria se alejan mucho de estos proveedores.