La farmacéutica Rovi obtuvo un beneficio neto de 118,8 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que supone un 2% menos que en el mismo periodo de 2022, según ha informado este miércoles la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El resultado bruto de explotación (Ebitda) de Rovi también descendió un 2% entre enero y septiembre, hasta los 171,2 millones de euros, lo mismo que el resultado neto de explotación (Ebit), que se situó en 153,4 millones de euros tras bajar un 2%.
Las ventas de la división de heparinas de Rovi disminuyeron un 10% entre enero y septiembre, hasta los 181,7 millones de euros, debido a la diferencia entre el incremento de pedidos vinculados al tratamiento de la Covid en 2022 y al menor volumen de pedidos esperado en 2023 por el mayor nivel de existencias de sus socios.
Para 2024, Rovi prevé que sus ingresos operativos disminuyan entre un 0% y un 10% frente a 2023
De cara al futuro, frente a la disminución de entre el 0% y el 10% prevista al finalizar el primer semestre, Rovi espera ahora que sus ingresos operativos se mantengan estables este año respecto a 2022. Al mismo tiempo, la compañía considera "razonable" esperar que los resultados "también se puedan ir ajustando a la baja en 2023".
Para 2024, Rovi prevé que sus ingresos operativos disminuyan entre un 0% y un 10% frente a 2023. No obstante, la compañía cree que existen determinados factores que podrían afectar a estas previsiones, como las campañas de vacunación de la Covid; la ganancia de clientes que podría traer la mayor capacidad de las cinco instalaciones de Rovi en Madrid, y la posible autorización para comercializar Risvan en el mercado estadounidense.