El fármaco antibiótico de Nabriva Therapeutics para tratar la neumonía, Lefamulina, cumplió el objetivo principal de un ensayo clínico clave, pero las preocupaciones sobre sus efectos secundarios provocaron que las acciones de la compañía cayeran un 13%.
Según un estudio, 45 de 370 pacientes que tomaban el medicamento de Nabriva han sufrido diarrea, en comparación con solo cuatro casos en pacientes que tomaron Moxifloxacina, un antibiótico usado comúnmente para la neumonía.
Unos 45 de 370 pacientes que tomaban el medicamento de Nabriva han sufrido diarrea, en comparación con solo cuatro casos en pacientes que tomaron Moxifloxacina
Aún así, el estudio demostró que la Lefamulina era tan efectiva como la Moxifloxacina en el tratamiento de la neumonía bacteriana.
Las acciones de Nabriva subieron más de un 20% el lunes por la mañana, pero revirtieron el rumbo y cayeron a un 14% hasta los 4,67 dólares (3,95 euros).
"El descenso probablemente reflejó el enfoque de los inversores en los efectos secundarios gastrointestinales del fármaco", ha dicho Robert Driscoll, analista de Wedbush, al tiempo que ha apuntado que "dado que ninguno de los casos fue grave y duraron un par de días, no cree que sea un gran problema".
La compañía planea solicitar la aprobación de comercialización de Lefamulin con la Agencia del Medicamento en Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) en el cuarto trimestre del año.
"Estamos un paso más cerca de poder hacer que una nueva clase de antibióticos tan necesaria esté disponible para los pacientes y los proveedores de atención médica", ha declarado Jennifer Schrazn, directora médica de Nabriva.