El pasado jueves 9 de marzo, las acciones de Silicon Valley Bank (SVB) se desplomaron más del 60% después de la venta de una cartera de bonos de 21.000 millones de dólares (19.567 millones de euros) y el anuncio de otra operación de unos 2.250 millones de dólares (2.096.millones de euros) para equilibrar el balance general. El balace fue de unas pérdidas de 1.800 millones de dólares (1.677 millones de euros). Una medida que desencadenó que varias empresas de capital de riesgo como Founders Fund, Coatue Management o Union Square Ventures, recomendaran a sus clientes que retirasen todo el dinero del banco, provocando el desplome total de su cartera accionarial y siendo finalmente cerrado por el Departamento de Innovación y Protección Financiera de California y puesto en manos de un organismo que se encargará de la administración y devolución de fondos.
En las últimas 48 horas se ha hecho más evidente el 'efecto contagio' a lo largo del mundo en las entidades bancarias y en otros sectores como la industria farmacéutica
Se trata de la segunda mayor quiebra de un banco en la historia de Estados Unidos tras el colapso de Washington Mutual en 2008. Por ello, y a pesar de no tener la magnitud de su antecesor, ha despertado un gran miedo en la sociedad internacional. Con el objetivo de calmar los ánimos ante esta situación, la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) ha salido al rescate y ha anunciado este lunes que los clientes podrán retirar sus depósitos sin límites, en lo que es un movimiento sin precedentes. Los clientes sí, pero los accionistas no. "Los inversores (accionistas) no serán protegidos. Asumieron un riesgo a sabiendas y, cuando el riesgo no les recompensó, los inversores perdieron su dinero. Así es cómo funciona el capitalismo", ha explicado el mismísimo presidente de los Estados Unidos, Joe Biden.a pesar de que se protege el dinero de los clientes, en las últimas 48 horas se ha hecho más evidente el efecto contagio a lo largo del mundo, tanto en las entidades bancarias como en otros sectores como la industria farmacéutica.
Para tratar de comprender la magnitud de una caída como la del SVB es necesario conocer en qué se basaba el propio banco. Considerado como el banco de las start ups y situado como la decimosexta entidad de EEUU., se trataba de una de las mayores entidades para las empresas tecnológicas que guardaban en su balance las grandes fuentes de liquidez que habían recibido por parte de fondos de capital de riesgo, venture capital o los controvertidos vehículos de las SPAC. Las épocas de tipos de interés bajos dejaron mucho dinero en estas empresas, guardando su liquidez en entidades como el Silicon Valley Bank. El problema llegó cuando el banco no encontró a quién “prestar ese dinero” para poder generar ingresos, provocando un exceso de liquidez que en un escenario marcado por el aumento de las tasas de interés de la FED y el agotamiento de la financiación de capital riesgo, se toparon con que los depósitos caían más rápido de lo previsto.
IMPACTO EN LA ECONOMÍA Y EN LA INDUSTRIA FARMACÉUTICA
La terrible noticia y sus similitudes con lo ocurrido en 2008 con la compañía global de servicios financieros de Estados Unidos, Lehman Brothers, han desencadenado un nerviosismo que se refleja claramente sobre las bolsas de valores de las mayores potencias financieras del mundo. Con caídas en el Ftse Mib de Milán, del 4% hacia abajo, el Cac 40 de París con un -1,9% y el Dax de Fráncfort cede algo más del 2%.
Desde Farmaindustria han explicado que todavía es complicado saber cuáles serán las consecuencias tangibles de lo ocurrido en Estados Unidos
En el caso de España y su IBEX 35, los más afectados evidente son los bancos, con el Banco Sabadell que se deja más de un 11%, le sigue BBVA con una caída del 8.24%, Bankinter con un -8,54%,Unicaja superando ligeramente el -7,78%, Santander con entre el -7,35 y CaixaBank superando el -6.24%. Por lo tanto, la tendencia negativa afecta también al global del IBEX 35, que pierde más del 3,5% y trata de sostener los 9.000 puntos.
Estas cifras demuestran que un desplome de las características del registrado por el Silicon Valley Bank tiene consecuencias no sólo en las compañías que tenían relación con el banco, sino también en la economía de muchos países y, por lo tanto, en todos los sectores que lo conforman. Como se puede observar en los registros de la industria farmacéutica en el IBEX 35, con una bajada del 2.53% para Grifols y del 1,5% para Rovi que aunque no lleguen al nivel de los bancos españoles explican el panorama actual de la banca. De cara al futuro, desde Farmaindustria han explicado en EmpresasConSalud que todavía es complicado saber cuáles serán las consecuencias tangibles de lo ocurrido en Estados Unidos.