Las vacunas contra la Covid supusieron un antes y un después en el panorama mundial, ya que consiguieron prevenir la enfermedad grave, las hospitalizaciones y la muerte contra todas las cepas del virus del SARS-CoV-2. Además, ayudaron a reducir la propagación de la enfermedad y a proteger a las personas más vulnerables, como los ancianos y aquellos con sistemas inmunológicos comprometidos.
Todo este éxito durante los primeros meses provocó un aumento nunca antes visto en los resultados financieros de las compañías que fabrican estos viales, tanto en sus ventas como en el beneficio final. Sin embargo, a medida que el brote de coronavirus ha pasado a la fase endémica, estas empresas han advertido sobre una caída en la demanda de productos Covid, cuyo impacto se hará incluso más evidente durante el otoño.
Pfizer señala la disminución de la proyección de las ventas del antiviral oral Paxlovid y de su vacuna contra la Covid, Comirnaty, como razones de su tendencia económica negativa
Una de las más afectadas ha sido, y parece que será a la larga, Pfizer. La farmacéutica estadounidense ha anunciado recientemente una actualización de sus previsiones con un recorte de los ingresos para 2023 de 9.000 millones de dólares (8.500 millones de euros), lo que supone un descenso hasta los 58.000 millones (54.800 millones de euros) totales. Muy por debajo del anterior rango, que se encontraba entre los 67.000 millones y los 70.000 millones de dólares (63.000 y 66.000 millones de euros).
En cuanto a las razones de esta tendencia negativa, Pfizer no ha dudado en señalar a la disminución de 7.000 millones de dólares (6.600 millones de euros) en su proyección de las ventas del antiviral oral Paxlovid, además de los 2.000 millones de dólares (1.800 millones de euros) menos de su vacuna contra la Covid, Comirnaty.
Estos recortes han tenido consecuencias directas en el valor de las acciones y en las previsiones de las compañías más grandes del sector que cuentan con las vacunas Covid como únicos productos aprobados, como es el caso de BioNTech, socio de Pfizer, desde marzo de 2020 tras alcanzar un acuerdo que surgió con el objetivo de desarrollar una vacuna basada en ARNm. En concreto, han reducido su valor en bolsa un 7,2% en las operaciones de Frankfurt.
A día de hoy, BioNTech ha anunciado, tras conocer las actualizaciones en las cifras de Pfizer, que han llevado a cabo una provisión de 900 millones de euros, con el objetivo de hacer frente a al deterioro de su inventario por la caída en la demanda de la vacuna contra la Covid. Esta caída no ha llegado por sorpresa a la biotecnológica alemana, ya que cerraron el ejercicio con un beneficio de 9.434 millones de euros, lo que supone un descenso del 8,3% respecto a 2021, influenciado claramente por el descenso en las ventas de la vacuna contra el Covid.
Estos recortes han tenido consecuencias directas en el valor de las acciones y en las previsiones de las compañías más grandes del sector que cuentan con las vacunas Covid como únicos productos aprobados
Del mismo modo, los resultados de Pfizer en el segundo trimestre muestran un panorama de continua caída que vaticina un final cercano para el mercado de productos Covid. En concreto, registraron un beneficio neto atribuible de 2.327 millones de dólares, un 77% menos que en el mismo periodo de 2022.
MODERNA
En esta misma situación, se encuentra Moderna, otra de las compañías que cuentan, hasta el momento, con una aprobación de la vacuna contra la Covid. En su caso, ha mantenido la actual previsión de ingresos de entre 6.000 y 8.000 millones de dólares (5.600 y 7.500 millones de euros) para 2023. Desde la compañía aluden a que “todavía es demasiado temprano en la temporada de vacunación de EE. UU. para proyectar con precisión dónde llegarán las tasas de vacunación durante todo el año", apuntan en un comunicado.
No obstante, el pasado mes de septiembre, la farmacéutica estadounidense anunció la reducción de su producción de vacunas contra en coronavirus, alegando una búsqueda de adaptación a la menor demanda. Una muestra más de la desvinculación del sector de los productos que dieron tantos beneficios pero que, ahora, no consiguen dar resultados positivos. Por su parte, en términos bursátiles, el anuncio de Pfizer también ha afectado al valor de las acciones de la farmacéutica, registrando una caída del 5%.