La farmacéutica japonesa Takeda se anotó un beneficio neto atribuido de 230.059 millones de yenes (1.672 millones de euros) en el conjunto de su año fiscal, finalizado en marzo, lo que equivale a un descenso del 38,8% en comparación con el ejercicio anterior.
Según ha informado la compañía, la facturación en el conjunto del año fue de 3,569 billones de yenes (25.950 millones de euros), un 11,6% más. Por segmentos de negocio, la división de gastroenterología avanzó un 12,6%, hasta 875.685 millones (6.367 millones de euros), al tiempo que el área de enfermedades raras aumentó sus ingresos un 3,3%, hasta 611.196 millones (4.444 millones de euros).
Takeda ha estado bajo presión para reducir la deuda y desarrollar su cartera de medicamentos para compensar la pérdida de la protección de patentes de medicamentos de franquicia como Vyvanse y Entyvio en los próximos años
El segmento de terapias fotodinámicas para inmunología se incrementó un 20,6%, hasta 506.951 millones (3.686 millones de euros), mientras que el segmento de oncología ingresó 468.730 millones (3.408 millones de euros), un 12,5% más, y la división de neurociencia facturó 482.294 millones (3.506 millones de euros), un 15,6% más.
El coste de los productos vendidos en el conjunto del año fue de 1,106 billones de yenes (8.041 millones de euros), un 11,3% más, mientras que los gastos de venta, generales y administrativos se elevaron un 1,3%, hasta 886.361 millones (6.445 millones de euros). La partida de investigación y desarrollo (I+D) fue de 526.087 millones (3.825 millones de euros), un 15,6% más.
Desde la adquisición de Shire en 2019, Takeda ha estado bajo presión para reducir la deuda y desarrollar su cartera de medicamentos para compensar la pérdida de la protección de patentes de medicamentos de franquicia como Vyvanse y Entyvio en los próximos años.