“Esta enfermedad no es más que una gripe”. Es lo primero que Laura García Belaústegui, médica nuclear en el Policlínico Sant'Orsola-Malpighi, quiere dejar claro al ser preguntada por el coronavirus. Hace un mes que se trasladó desde Madrid a Italia para hacer una residencia. Vive y trabaja en Bolonia, en la región de Emilia-Romana, que hace frontera con dos de los principales focos de contagio del coronavirus, Lombardía y Veneto. Dice estar muy preocupada, pero no por el brote.
“Me preocupa la alarma social porque ha provocado el desabastecimiento de mascarillas y alcohol para las manos. ¿Qué pasa con las personas que lo necesitan de verdad? Bien sea por el coronavirus o porque es una persona inmunodeprimida que está atravesando un cáncer y necesita protegerse de cualquier enfermedad”. La demanda de mascarillas ha crecido desde enero en un 700% y ha dejado a las distribuidoras sin material en stock. Todo a pesar de que las autoridades sanitarias están insistiendo en que su uso no es ni obligatorio ni necesario en personas sanas y que no evita el contagio del virus. “Este alarmismo ya empezó fuera de Italia y, cómo no, ya ha llegado”, asegura Laura.
"Cuando me paseo por el hospital no veo nada distinto al mes pasado"
“Cada cinco minutos recibo mensajes de amigos de España para que vuelva. Si tuviera miedo ya habría vuelto, no tengo nada que me ate aquí. No entienden que no hay peligro, que esun tipo de gripe. Desde los medios se está dando la misma cobertura que si fuera el ébola. Pero son enfermedades que no tienen nada que ver. El ébola mata con una hemorragia interna a quien se contagia, y del coronavirus se curan la grandísima mayoría de los enfermos”.
TEMOR A LO DESCONOCIDO
En la ciudad de Bolonia no se han registrado casos de contagio, aunque sí en otras partes de la región. El clima que se respira por el momento es de tranquilidad y normalidad. “Cuando me paseo por el hospital no veo nada distinto al mes pasado. Lo que se está haciendo ahora es recibir en Urgencias a los pacientes que llegan con síntomas de coronavirus, hacerles la prueba (que allí se conoce como ‘Tampone’) y devolverles a su casa si están fuera de peligro porque no hay hospital que pueda albergar a toda la gente que se va a contagiar, ni tantas unidades de cuidados intensivos (UCI). Es importante seleccionar bien quién se queda en el hospital y a quién hay que decirle: vete a tu casa y pásalo como un catarro”.
“El coronavirus no se va a erradicar, sino que nos vamos a acostumbrar a él, nos daremos cuenta por fin de lo que significa y de que no nos mata más que una gripe común”
Es el mismo protocolo que se sigue en cualquier hospital al que llegan posibles afectados. Se quedan ingresados solo si son pacientes de alto riesgo. “El coronavirus, igual que otras cepas de gripe, es muy peligroso para personas con otras complicaciones o enfermedades previas, pero el resto de la gente lo pasa se como un catarro, literal”. Cree que una de las razones por las que se le tiene tanto miedo es que “no hemos oído nunca hablar de este virus, es completamente nuevo”.
Laura explica que la diferencia entre el coronavirus y la gripe común es que el primero se agarra más fuerte a las células del propio pulmón, en vez de a las del tracto respiratorio superior. En el caso de que tengas enfermedades pulmonares o cáncer (que te baja las defensas) es mucho más difícil que tu cuerpo sea capaz de eliminar ese virus. Es entonces cuando puede derivar en una neumonía bilateral seria que puede causarte la muerte. Sin embargo una persona sana, aunque tenga 60 o 70 años, va a expulsar ese virus de forma normal”, explica Laura.
“SE ESTÁN TOMANDO MEDIDAS ALEATORIAS”
El cierre de colegios, universidades, cines y teatros son algunas de las primeras medidas que han tomado las autoridades italianas para evitar la propagación del coronavirus. El transporte público, sin embargo, sigue funcionando. “He oído que este fin de semana se van a cerrar también algunos bares y discotecas. Son medidas, en mi opinión, un poco aleatorias. Si quieres hacer una prevención de verdad por una enfermedad que consideras potencialmente muy grave tienes que aislar a la gente en sus casas. No tiene sentido que no pueda ir a una discoteca pero sí al gimnasio o a su puesto de trabajo”, cuenta Laura.
Pasajeros en un tren de Milán. (Foto. Pablo Fernández)
“Ayer nos reíamos porque dicen que quizá se prohíba viajar desde las regiones del norte de Italia a otros lugares de Europa. ¡Pero sin embargo puedes coger el tren, irte a Roma y coger el vuelo desde allí! ¿Qué sentido tiene esto?”, se pregunta.
Desde su experiencia como profesional sanitaria opina que es prácticamente imposible que el virus se contenga. “Lo que va a pasar es que nos vamos a acostumbrar a la enfermedad, nos daremos cuenta por fin de lo que significa, de que no nos mata y dejará de salir en los medios cuando surja otra noticia más llamativa”.