Terapia cognitivo-conductual aplicada al insomnio: "Es una solución muy efectiva a largo plazo"

El vocal de la Junta de Gobierno de COP Madrid, Vicente Prieto, explica a ConSalud.es la efectividad de estos tratamientos centrados en la gestión de los pensamientos que nos impiden dormir y en la manera de actuar ante ellos

El Dr. Vicente Prieto, vocal de la Junta de Gobierno de COP Madrid., habla de las terapias cognitivo-conductual en el abordaje del insomnio (COP)
24 julio 2024 | 07:00 h

Un buen descanso es la piedra angular para del bienestar físico y mental de las personas. Por ello, ante situaciones de insomnio continuado, los afectados entran en una espiral de agotamiento y se hace necesario que acudan a un profesional médico que les ayude. Las causas que originan el insomnio son muy variadas y, en ocasiones, requieren ser tratadas más allá de la mera medicación. En concreto, existe la posibilidad de recibir terapias cognitivo-conductuales que se adentran en los factores internos que impiden dormir a cada persona.

En este sentido, un reciente estudio, llevado a cabo por investigadores chinos y publicado en la revista Sleep,ha concluido que la terapia cognitivo-conductual (TCC) para el insomnio presenta mayor rentabilidad y una eficacia más duradera que otros tratamientos de abordaje. Una opinión compartida por Vicente Prieto, psicólogo clínico y vocal de la Junta de Gobierno de COP Madrid, quien explica a ConSalud.es que “estamos demostrando que las TCC para el insomnio dan muy buenos resultados, por encima de tratamientos exclusivamente farmacológicos”.

“Todos, en algún momento, tenemos preocupaciones que rumiamos con la almohada cuando nos encontramos con nosotros mismos"

Factores como el ritmo de vida actual y el creciente envejecimiento de la población hacen que el insomnio sea un trastorno cada vez más común. Igualmente, el psicólogo clínico lamenta que la impaciencia que nos rodea lleva a que se busquen “soluciones rápidas” en lugar de remedios más efectivos y de mayor continuidad. “Lo más rápido es utilizar pastillas para dormir, pero conviene enseñar al paciente a modificar su propia forma de pensar, a gestionar su comportamiento y a formarle en higiene del sueño para sacar el máximo rendimiento sus horas de descanso”, remarca.

En esta línea, las terapias cognitivas-conductuales aplicadas a las patologías del sueño son un tipo de terapia psicológica en la que, mediante la ayuda de un psicoterapeuta, se realizan diferentes sesiones que ayudan a la persona a tomar más conciencia de sus pensamientos negativos y le facilitan vías para manejar calmadamente las situaciones diarias de mucho estrés que le acompañan hasta su cama. “Todos, en algún momento, tenemos preocupaciones que rumiamos con la almohada cuando nos encontramos con nosotros mismos. Esto provoca una situación de ansiedad que nos impide dormir”, explica el Prieto.

Este estrés es un elemento habitual en cualquier individuo y puede afectarle puntualmente al sueño en determinados momentos de su vida. Sin embargo, se convierte en una verdadera problemática cuando el insomnio es algo recurrente y conviene poner medios para solucionarlo. “Es necesario hacer terapia y analizar qué está pasando. Contrastar y evaluar de manera objetiva esos pensamientos negativos a los que les damos vueltas por la noche. Enseñamos a encontrar una conclusión, a decir ‘lo voy a resolver de esta manera y ya mañana lo hago’”, desvela el vocal de COP Madrid.

“El enfoque cognitivo-conductual pone en relación cómo estás pensando, cómo te hace sentir y, a partir de ahí, cómo ha de ser tu estilo de comportamiento”

De esta manera, la TCC engloba diferentes estrategias que van desde la respiración, la relajación, el análisis de lo que el afectado por insomnio piensa y siente al intentar dormir, pero también de lo que hace –pantallas, alimentación, actividad física, etc-. “Se trabaja un estilo de comportamiento –higiene del sueño- con todas estas estrategias. Distribuidas en unas diez sesiones de media, una persona puede aprender a gestionar su problema de sueño, a no ser que tenga otras patologías asociadas”, destaca el psicólogo clínico.

Por todo ello, las terapias cognitivo-conductuales se presentan como una posibilidad que resulta muy efectiva para poner una barrera al insomnio que sepamos manejar a lo largo de toda la vida, ahorrando, además una sobremedicación continuada. Unas terapias que, por otra parte, pueden aplicarse a cualquier otro ámbito de nuestra vida. “El enfoque cognitivo-conductual pone en relación cómo estás pensando, cómo te hace sentir y, a partir de ahí, cómo ha de ser tu estilo de comportamiento”, concluye el psicólogo clínico.

LA SALUD Y EL SUEÑO

Según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), un 25-35% de la población adulta padece insomnio transitorio y entre un 10 y un 15%, más de cuatro millones de adultos españoles,  sufren de insomnio crónico. “Actualmente, y en sus distintas variantes: conciliación, fragmentación o mantenimiento, despertar precoz, sensación de sueño no reparador y paradójico, es el principal motivo de consulta en sueño”, señala el Dr. Hernando Pérez Díaz, Coordinador del Grupo de Sueño de la SEN, desde donde remarcan también que la TCC puede resolver aproximadamente un 70% de los insomnios.

"Es importante un correcto diagnóstico de este trastorno y que sea aconsejable, siempre que sea factible, intentar actuar sobre la causa y no sólo en los síntomas”

“El insomnio es un problema de salud importante, ya que, en su forma crónica, se ha asociado a una reducción en la calidad de vida, pero también al rendimiento diario, a déficits cognitivos y de memoria, a problemas de ansiedad y depresión, así como a problemas de hipertensión, diabetes, obesidad, con lo que eso supone para la salud y para la aparición de otras enfermedades. Pero, además, puede ser un síntoma de otra enfermedad. Por lo tanto, es importante un correcto diagnóstico de este trastorno y que sea aconsejable, siempre que sea factible, intentar actuar sobre la causa y no sólo en los síntomas”, concluye el Dr. Hernando Pérez.

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