El pasado 2 de agosto conocíamos un dato objetivamente bueno. La afiliación de sanitarios a la Seguridad Social batía todos sus registros.Lo hacía, además, en un contexto en que por primera vez a nivel general se perdía empleo. La cifra de empleo en el sector de actividades sanitarias superaba el récord de agosto de 2023 y llegaba a 1.337.617 afiliados con una creación de empleo respecto a junio de más de 40.000 personas.
Ese dato incluye también a los afiliados en el régimen de autónomos, pero si nos detenemos a mirar el Régimen General observamos también el récord de afiliación superando por primera vez la barrera del 1.200.000. En concreto 1.205.663 afiliados en el mes de julio. En términos interanuales estaríamos hablando de un crecimiento del empleo sanitario cercano al 3%.
Datos positivos, que como siempre, tienen su lado oscuro: La parcialidad y la temporalidad. Los datos son elocuentes. Del 1.205.663 afiliados, según los datos del Ministerio de Inclusión y Seguridad Social, poco más del 32% son contratos indefinidos. 273.303 corresponden a contratos indefinidos a tiempo completo (22,6%), 114.245 a indefinidos a tiempo parcial (9,5%). La cifra de contratos indefinidos a nivel general es del 72,75%, más del doble que en el sector salud.
La temporalidad en el sector salud alcanza el 41,2% más del triple que en el resto del Régimen General
Si observamos las cifras de los contratos temporales vemos como sucede al contrario: la temporalidad del sector de actividades sanitarias triplica a la del Régimen General. Del 1.205.663 afiliados en el sector sanitario, 451.634 (37.4%) tenían contrato temporal indefinido y 46.018 (3.8%) contrato temporal a tiempo parcial. En total, 41,2% de contratos temporales frente al 13,75% del total.
Desde que en marzo de 2022 entró en vigor de la reforma laboral la temporalidad se ha reducido casi a la mitad (del 24,2% al 13.75%) en el Régimen General, algo que no ha ocurrido en el sector salud que se ha mantenido prácticamente en los mismos niveles. La tasa de temporalidad ha caído apenas tres puntos, del 44,3% al 41.2% en dos años y medio.
La estadística del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones incluye un apartado llamado“otros” (312.586 ) que representan casi el 26% de los contratos. En la metodología explica lo siguiente: “Bajo la modalidad de “Otros” se incluyen los afiliados en alta que no tienen contrato. De forma mayoritaria se trata de funcionarios a quienes es de aplicación el Régimen General, y en el resto de los casos se trata de cuidadores no profesionales, algunos socios trabajadores de cooperativas, y personas incluidas en programas de formación y prácticas no laborales en empresas”. Si comparamos ese apartado en el resto de sectores no llega al 9% del total.
EN VERANO SE HA DISPARADO LA TEMPORALIDAD
El empleo en el sector de actividades sanitarias lleva desde marzo aumentando la afiliación. Cinco meses consecutivos de creación de empleo que se han saldado con 65.809 nuevos puestos de trabajo. De todos ellos, 49.070 (74,5%) son contratos temporales: 47.943 a tiempo completo y 1.127 a tiempo parcial. Esto quiere decir que tres de cada cuatro nuevas contrataciones son temporales. Sólo 3.429 (5,2%) son contratos indefinidos, 2.864 a tiempo completo y 565 a tiempo parcial. 11.959 contratos nuevos en el apartado otros que representan el 18,7%.
En julio los contratos indefinidos a tiempo completo sólo aumentaron en 15 afiliados
El gran salto en la contratación se ha dado en verano, en junio y julio. Sólo en el último mes se crearon 40.600 empleos en el sector de actividades sanitarias. Sin embargo ha sido en julio cuando se ha disparado la temporalidad. De esa cifra, 37.342 fueron temporales a tiempo completo y 677 temporal a tiempo parcial. Esto significa que el 93,64% de los contratos firmados por sanitarios en julio fueron temporales.
Estos datos contrastan con la afiliación de manera indefinida. A tiempo completo sólo se sumaron 15 contratos y se perdieron 784 a tiempo parcial. El apartado otros sumó 3.439 contratos.