Aunque poco a poco se va avanzando en la aprobación de especialidades y en asegurar profesionales preparados para responder a las necesidades de los pacientes, lo cierto es que todavía queda mucho trabajo. Una labor paralizada debido a la convocatoria de elecciones generales para el 23 de julio y que supone que durante más tiempo se sigan repitiendo los procesos de inequidad, desigualdad e insatisfacción en el abordaje sanitario. Una de esas especialidades no reconocidas es la de Piscooncología y Psicología Paliativa.
En febrero el Consejo General de Psicología (COP), la Sociedad Española de Psicooncología (SEPO), la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL) y la Sociedad Española de Cuidados Paliativos Pediátricos (PEDPAL) se comprometieron a impulsar la creación de la Especialidad de Psicólogo Especialista en Psicooncología y Psicología Paliativa a través de la redacción ‘Título de Psicólogo/a Especialista en Psicooncología y Psicología Paliativa. Criterios para la creación de la Especialidad’. Una medida con la que se preparan profesionales para ir más allá de los problemas de salud mental que pueden desarrollar los pacientes oncológicos o aquellos en el final de su vida.
Dar herramientas para afrontar el diagnóstico y los efectos secundarios del tratamiento y apoyar a las familias y ofrecer soporte emocional son las funciones de estos psicólogos. Durante los últimos años, “la totalidad de las comunidades autónomas han señalado la necesidad de la asistencia psicológica para las personas afectadas por enfermedades avanzadas, ya sean enfermos o familiares”, señala Helena García-Llana, psicóloga y vicepresidenta de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL) a ConSalud.es.
García-Llana: “Es necesario reconocer la especialidad de forma urgente”
Sin embargo, actualmente no se produce una “correcta cobertura” de los pacientes y se precisa la incorporación de más profesionales. “Es necesario reconocer la especialidad de forma urgente”, insiste la especialista. Una medida en espera, teniendo en cuenta que la Estrategia de Cuidados Paliativos no se actualiza desde 2014, nueve años en los que el abordaje de las personas con enfermedad avanzada ha cambiado radicalmente.
LA FALTA DE ESPECIALIDAD
Pacientes y sanitarios cada vez demandan más este tipo de atención. Sin embargo, la falta de profesionales especializados no permite cubrir las plazas que salen. Si ya es complicado conseguir cuidados paliativos especializados, en 2017 en España solo el 40% de aquellos que requerían esta atención la recibieron, más difícil es ser atendido por un psicólogo especializado en Oncología y paliativos. En nuestro país “existen más de 400 profesionales de la Psicooncología y Psicología Paliativa, repartidos por todo el territorio nacional y trabajando en distintas asociaciones y entidades sin ánimo de lucro”, destaca García-Llana. Sin embargo, sin la especialidad reconocida en nuestro país.
Como indica la especialista, en este contexto no se puede “garantizar el acceso de los pacientes y sus familias a estos recursos”. “La no existencia de una especialidad supone necesidades sin cubrir en pacientes y familia, lo que supone una gran inequidad y problema ético de gran envergadura. Intervenciones eficaces que no se implantan suponen maleficencia por omisión”, continúa.
Una atención que ahora, con 400 psicólogos formados pero sin la especialidad reconocida en España, es “insuficiente”
Actualmente un importante porcentaje de pacientes en el proceso final de su vida con una patología avanzada no cuentan con la atención precisa: un abordaje integral y especializado que palie el sufrimiento que la propia enfermedad o su tratamiento puede causar, así como la evolución o el pronóstico. También que ayude a los familiares en el proceso de tratamiento de la enfermedad y el desarrollo final, con herramientas que prevengan el duelo prolongado.
Esta asistencia está dedicada también a los supervivientes, que se enfrentan a una nueva realidad y a las posibles secuelas de un tratamiento largo y con importantes niveles de toxicidad. Además, los profesionales de Psicología oncológica y paliativa “optimizan la comunicación entre los profesionales sanitarios, los pacientes y los cuidadores, para facilitar la toma de decisión; e intervienen en el manejo de estrés de los propios sanitarios”, indica García Llana.
Una atención que ahora, con 400 psicólogos formados pero sin la especialidad reconocida en España, es “insuficiente”. Ante esta situación señala la necesidad de aprobar la especialización y garantizar el trabajo de los profesionales para “potenciar” el bienestar y la calidad de vida de los pacientes y sus familias. “Esto tendría grandes beneficios para la mejora de la atención a pacientes con cáncer y en cuidados paliativos con cualquier enfermedad avanzada, así como a sus familiares, sin que genere o suponga desventajas o perjuicios para las otras especialidades ya existentes”, concluye la vicepresidenta de SECPAL.