El Servicio de Endocrinología y Nutrición de Puerta de Hierro, reconocido por su calidad y humanidad

El Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Puerta de Hierro es reconocido por su calidad y humanización en la atención a los pacientes con diabetes

El Servicio de Endocrinología y Nutrición de Puerta de Hierro, reconocido por su calidad y humanidad (Foto: Freepik)

El Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Puerta de Hierro ha obtenido la certificación de la Fundación Humans por su calidad y humanización en la atención sanitaria a los pacientes con diabetes. Con esta certificación, la fundación pone en valor el fuerte compromiso de este Servicio con todas las personas con diabetes que son diagnosticadas y atendidas en este centro.

Desde el Servicio, el objetivo es ofrecer una atención integral y personalizada a todos los pacientes, de forma que un equipo de personas formado por enfermeras educadoras y médicos especialistas se encarga de acompañar al paciente desde el primer momento del diagnóstico y a lo largo de todas las etapas de su enfermedad: transición de la edad pediátrica a la edad adulta, gestación, aparición de otras enfermedades que puedan descompensar la patología, desarrollo de complicaciones y seguimiento en etapas finales de la vida. Así, el reto no es solo diagnosticar y tratar, sino también acompañar al paciente, humanizando todo su proceso asistencial.

Además, otro de los pilares fundamentales del trabajo diario del Servicio de Endocrinología y Nutrición, y al que dedican gran parte de su tiempo y esfuerzo, es la prevención de complicaciones crónicas micro y macrovasculares en estos pacientes.

El objetivo de este Servicio es ofrecer una atención integral y personalizada a todos los pacientes

Una labor asistencial muy completa y global que requiere de un equipo multidisciplinar de profesionales, un aspecto vital para garantizar la excelencia y la calidad en el manejo de estas personas. Así, además de facultativos especialistas en endocrinología y nutrición y enfermeras educadoras en diabetes, el Servicio cuenta con el apoyo y la colaboración de médicos de atención primaria del área y médicos hospitalarios especialistas en endocrinología pediátrica, obstetricia y ginecología, nefrología, oftalmología, cardiología y neurología, entre otros profesionales.

Otra característica importante es que, además de ofrecer asistencia clínica tanto en consultas externas como en la planta de hospitalización a los pacientes, el Servicio tiene también muy desarrolladas la rama de docencia y formación para sus profesionales y la rama de investigación, con varias líneas activas en diabetes.

Además, en los últimos años, la tecnología ha facilitado mucho el manejo de la diabetes, con la aparición de sensores de glucemia y de sistemas de infusión continua de insulina (bombas de insulina). Actualmente, casi 1.500 pacientes del hospital utilizan ya estos dispositivos: 1.078 personas con diabetes tipo 1 utilizan sensores de glucemia y 368 son usuarios de bombas de insulina. Estos últimos dispositivos ya están siendo utilizados por la gran mayoría de pacientes con diabetes tipo 1 y su uso se está ahora extendiendo progresivamente a los pacientes con diabetes tipo 2.

En los últimos años, la tecnología ha facilitado mucho el manejo de la diabetes

El uso de esta tecnología ha supuesto una gran mejoría del control metabólico, ya que ha significado una reducción del número de hipoglucemias y una mejora de la calidad de vida de estos pacientes, que están experimentando un número menor de complicaciones, tanto agudas como crónicas.

Pero tanto estas mejoras tecnológicas como cualquier otro avance en diabetes debe ir acompañado necesariamente de formación, de educación terapéutica, para que la persona con diabetes pueda realmente contar con todas las herramientas necesarias para la toma de decisiones relacionadas con su patología en cada momento.

Así, el Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Puerta de Hierro forma a los pacientes en aspectos básicos como la administración de insulina, la medición de la glucemia en sangre capilar y la prevención y tratamiento de las descompensaciones agudas (hipo e hiperglucemias).

Pero no solo eso, sino que se les capacita también para otras tareas más complejas como el contaje de carbohidratos, el cálculo de la dosis de insulina acorde con la ingesta, la cifra de glucemia, la actividad física, la presencia de otras enfermedades que se pueden producir simultáneamente y, ahora, también sobre la utilización de estos nuevos dispositivos tecnológicos.

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