Equipos del CIBER de Enfermedades Infecciosas (CIBERINFEC), liderados desde el Instituto de Investigación Sanitaria Illes Balears (IdISBa) /Hospital Son Espases, han analizado la evolución de la resistencia a los antibióticos de la Pseudomonas aeruginosa. Los resultados del estudio, que ha contado con la participación de más de 60 hospitales españoles, han sido publicados en The Lancet Regional Health-Europe.
La investigación ha analizado a nivel fenotípico y genómico más de 3000 cepas deP. aeruginosa obtenidas de pacientes infectados en dos periodos separados por cinco años (2017 y 2022). “Hemos documentado un descenso generalizado de la resistencia a los antibióticos de este relevante patógeno, incluyendo los perfiles de multirresistencia y resistencia extensa”, explica Antonio Oliver, jefe de grupo del CIBERINFEC en IDISBA y último firmante del artículo.
Antonio Oliver: “Hemos documentado un descenso generalizado de la resistencia a los antibióticos de este relevante patógeno, incluyendo los perfiles de multirresistencia y resistencia extensa”
El trabajo revela que, en 2022, estas bacterias mostraron una menor resistencia a todos los antibióticos evaluados, tanto los más antiguos como los más nuevos. Esto se traduce en que estas bacterias fueron más susceptibles a los tratamientos.
Además, se encontró una disminución significativa en la prevalencia de perfiles bacterianos de multirresistencia (resistencia a tres o más familias de antibióticos) y resistencia extensa (resistencia a todas menos una o dos familias) en 2022, en comparación con 2017. “Esta reducción fue evidente en general, pero fue aún más notable entre las cepas aisladas en las unidades de cuidados intensivos”, añade Laura Zamorano Paez, investigadora de IdisBa y CIBERINFEC y otra de las autoras principales.
Sin embargo, se observó un incremento significativo de la proporción de cepas con estos perfiles que producen el mecanismo más peligroso, las carbapenemasas, asociadas con la diseminación de la cepa epidémica hipervirulenta ST235. Se trata de una variante específica de P. aeruginosa, que posee características particulares de hipervirulencia y resistencia a los antibióticos.
Esta variante tiene una gran capacidad para propagarse y causar enfermedades en un importante número de individuos. “La combinación de hipervirulencia y resistencia a los antibióticos es especialmente preocupante en el contexto médico” apunta la Dra. Zamorano.
El aumento en las cepas que producen carbapenemasas es preocupante, debido a que se trata de enzimas que confieren resistencia a los carbapenémicos, antibióticos empleados en situaciones clínicas críticas. La expansión de la cepa ST235, además, plantea desafíos adicionales para el control de las infecciones.
Dra. Zamorano: “La combinación de hipervirulencia y resistencia a los antibióticos es especialmente preocupante en el contexto médico”
“Para abordar estos problemas y comprender mejor las tendencias de resistencia es fundamental mantener una vigilancia continua que permita seguir de cerca la evolución de la resistencia a los antimicrobianos y analizar el impacto de los planes nacionales destinados a combatir la resistencia a los antibióticos”, ha advertido el equipo.
Así, es necesario establecer estrategias específicas para el diagnóstico rápido de las infecciones por esta cepa, que es particularmente peligrosa. De este modo se podrían establecer tratamientos personalizados de precisión y contener su diseminación.