La futura creación de un PIRde Psicología Infantil se ha convertido en uno de los principales objetivos del colectivo de psicólogos de cara a la presente legislatura. No en vano, consideran que las singularidades de la atención emocional a los menores implica una serie de rasgos diferenciales a nivel formativo que los estudiantes deberían adquirir durante su preparación. De la misma manera, la presencia de esta nueva modalidad serviría para asegurar más plazas destinadas al ámbito y fortalecer la investigación en psicología infantil, en un contexto en el que la salud mental está más de relieve que nunca.
Desde la Sociedad Española de Psicología Clínica (Anpir), junto con el resto de entidades del ámbito, formalizaron la solicitud de la especialidad el pasado año, pero finalmente resulto denegada por problemas técnicos en la petición. Ha sido ahora, tras mantener un encuentro con el Ministerio de Sanidad, cuando se ha logrado desencallar la iniciativa. No en vano, el departamento de Mónica García trasladó la semana pasada a Anpir que alguna CC.AA. había puesto sobre la mesa esta petición. "Ha llegado a la comisión de recursos humanos y sabemos que muchas regiones son partidarias”, aclara a ConSalud.es la Dra. Gloria Bellido, coordinadora de la sección Infantil de SEPC-Anpir .
“Como asociación científica hemos mantenido diferentes reuniones con representantes sanitarios autonómicos y varios nos avanzaron que trasladarían esta propuesta directamente al ministerio”
De esta manera, aunque el colectivo seguirá trabajando desde todos los ámbitos, la vía política de aunar el apoya de las diferentes consejerías de Sanidad se presenta como el camino más directo a conseguir el objetivo de disponer de la nueva especialidad de la Psicología Clínica de la Infancia y la Adolescencia. “Como asociación científica hemos mantenido diferentes reuniones con representantes sanitarios autonómicos y varios nos avanzaron que trasladarían esta propuesta directamente al ministerio en próximos encuentros”, se muestra satisfecha la psicóloga clínica.
LA ESPECIALIDAD, MÁS CERCA
En este sentido, el nuevo paso conseguido hace que se dispare el optimismo, en vista del “consenso político” que parece haberse labrado la posibilidad de que pronto pueda ampliarse la convocatoria de formación sanitaria especializada en el SNS con la presencia de un examen PIR de Psicología Infantil. “Ojalá pudiera darse lo antes posible –en 2025-, dado que una vez que tenga luz verde habrá que trabajar en el itinerario formativo, ofertarse las plazas y esperar años a tener los primeros profesionales formados”, apunta la coordinadora de SEPC.
“Es una nueva realidad. Ha habido mucho desarrollo en la salud mental perinatal, la atención temprana entre 0 y 3 años; igualmente, ahora existen dispositivos asistenciales más específicos"
En la misma línea, desde las diferentes asociaciones y entidades de psicología clínica tienen claro que el nuevo PIR en la modalidad permitirá una “adecuada cualificación del profesional” a la hora de adquirir los conocimientos y competencias necesarias para la evaluación, diagnóstico e intervención en los menores de edad que presenten problemas psicológicos o psicopatológicos, así como para la promoción de la salud mental en los más pequeños. “La psicología clínica infanto-juvenil tiene unas características, conocimientos y habilidades propias que, además, se han ido ampliando en los últimos años”, destaca.
En concreto, las circunstancias de la salud mental de los menores en 2024 nada tienen que ver con las de esta misma población décadas atrás. “Es una nueva realidad. Ha habido mucho desarrollo en la salud mental perinatal y la atención temprana entre 0 y 3 años; igualmente, ahora existen dispositivos asistenciales más específicos (menores víctimas de maltrato, violencia sexual, adicciones, etc) que requieren mucha más formación”. Por todo ello, si bien la propia Psicología Clínica tiene un espacio para ello, la capacitación para infanto-juvenil “se está quedando corta ante las nuevas realidades”, remarca.
UN PROBLEMA NADA MENOR
En la actualidad, se calcula que aproximadamente el 20% de los niños y adolescentes del mundo tienen trastornos o problemas mentales. Esto provoca que el suicidio haya aparecido como una importante causa de muerte en jóvenes de entre 15 y 19 años. Por tanto, la nueva especialidad contribuirá a “mejorar la detección precoz de casos, realizar mejores cribados y tratamientos”. Igualmente, indica la Dra. Bellido, “es muy necesaria” para organizar de manera adecuada los sistemas de gestión, luchar contra el estigma o favorecer la prevención del suicidio.
La sociedad de hoy en día tiene “muchas complejidades añadidas: redes sociales, internet, móviles, abuso de pantallas, etc” y son las propias familias las que “reclaman apoyo y consejo para saber lidiar con ello"
De esta manera, no conviene olvidar que las problemáticas de salud mental suelen tener sus inicios en la edad más temprana. Abordarlas de manera prematura y especializada remará a favor de evitar el desarrollo futuro de los desequilibrios y patologías emocionales en la población adulta. La infancia de hoy en día tiene “muchas complejidades añadidas: redes sociales, internet, móviles, abuso de pantallas, etc” y son las propias familias las que “reclaman apoyo y consejo para saber lidiar con ello y proteger la salud mental de sus hijos”, concluye la coordinadora de la sección Infantil de SEPC-Anpir.