El Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) ha ejercicio nuevamente su derecho de petición a la Secretaría de Estado de la Seguridad Social y Pensiones solicitando el inicio de los estudios necesarios para el reconocimiento de la profesión sanitaria como profesión de riesgo y, por lo tanto, la reducción de la edad de jubilación a los 60 años; "una petición que nos fue denegada años atrás".
El artículo 206 del texto refundido de la Ley General de la Seguridad Social prevé que la edad mínima de 65 años exigida para tener derecho a pensión de jubilación podrá ser rebajada por Real Decreto, a propuesta del Ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, en aquellos grupos o actividades profesionales en las escalas, categorías o especialidades cuyos trabajos sean de naturaleza excepcionalmente penosa, tóxica, peligrosa o insalubre y acusen elevados índices de morbilidad o mortalidad.
"Todas estas tensiones, implicación y esfuerzos deterioran la salud y provocan altos índices de morbilidad y, por lo tanto, de absentismo"
Los profesionales sanitarios y sociosanitarios, tanto en Atención Primaria como en Especializada, "están dentro de estas categorías, pues en su trabajo diario se enfrentan a riesgos para su salud al estar expuestos a posibles infecciones, radiaciones y productos tóxicos, pero también al desgaste físico, psíquico y social que conllevan los turnos rotatorios y nocturnos, la fatiga mental, la escasez de personal, el envejecimiento de la población, en su mayoría dependientes/grandes dependientes, y la presión asistencial. Todas estas tensiones, implicación y esfuerzos deterioran la salud y provocan altos índices de morbilidad y, por lo tanto, de absentismo".
"Por todo ello, desde SAE hemos ejercicio nuevamente nuestro derecho de petición a la Secretaría de Estado de la Seguridad Social y Pensiones solicitando la realización de un estudio en el que se contemplen la siniestralidad del sector, la morbilidad y mortalidad, las condiciones de trabajo -peligrosidad, insalubridad, toxidad, turnicidad, entre otros factores-, y los requerimientos físicos y psíquicos que precisa la atención sanitaria. Características que obligan a estos profesionales a jubilarse de manera anticipada, aún perdiendo dinero por los coeficientes reductores que se aplican. Por ello desde SAE exigimos la jubilación de los profesionales sanitarios a los 60 años sin penalizar", sentencia Isabel Lozano, secretaria de organización y comunicación de SAE.