Hace unos días, la Sociedad Española de Obesidad le pedía al próximo Gobierno, a través de ConSalud.es, “medidas eficaces” que permitan frenar el crecimiento de las tasas de obesidad (índice de masa corporal >30 kg/m2). Ahora es la Sociedad Española de Cirugía de la Obesidad, que tiene como objetivo principal el tratamiento de la obesidad mórbida y sus enfermedades asociadas, quien hace lo propio con la obesidad mórbida, el grado más alto de la enfermedad (≥40.0 Kg/m2).
SECO critica que la obesidad mórbida todavía no es reconocida como enfermedad por muchos especialistas y que hay pocos equipos multidisciplinares para el tratamiento de la obesidad mórbida en los centros públicos españoles. Además, señalan, desde la Atención Primaria hay una gran dificultad para la derivación de los pacientes al especialista, que en el caso de esta enfermedad es ya directamente el cirujano.
"Los pocos equipos que realizan la cirugía bariátrica tienen una elevada lista de espera"
Y es que, según destaca SECO, la cirugía bariátrica es el tratamiento “más efectivo, eficaz y con mejores resultados a largo plazo”. Sin embargo, critican, apenas llega al 1-3% de la población que podría beneficiarse cada año del tratamiento, en parte porque los pocos equipos que la realizan suelen tener una elevada carga asistencial y, por ello, también una elevada lista de espera.
Además, denuncian, la cirugía bariátrica “no es considerada como un procedimiento quirúrgico con tiempo de espera garantizado, por lo que en todas las Comunidades Autónomas está en una lista de espera no prioritaria”. “En los centros hospitalarios, la cirugía bariátrica no es considerada una prioridad al mismo nivel que podría ser la cirugía oncológica o la cirugía cardiovascular”, añaden, resaltando que todavía son pocos los especialistas formados de manera adecuada en el “tratamiento multidisciplinar” de la obesidad mórbida.
"La obesidad se debe considerar como una enfermedad grave e invalidante"
Por todo ello, SECO pide al próximo Gobierno de España, como primera medida, “reconocer de forma oficial la obesidad como una enfermedad grave e invalidante”. En segundo lugar, fomentar la creación de equipos multidisciplinares para el tratamiento de la obesidad mórbida en los centros públicos, así como su adecuada coordinación con la Atención Primaria para una adecuada derivación posterior.
Una vez facilitada esa derivación al especialista desde la Atención Primaria, piden considerar la cirugía bariátrica como un procedimiento quirúrgico “con lista de espera garantizada en todas las comunidades autónomas”. “La cirugía bariátrica debe ser considerada como una prioridad en cada centro asistencial público”, añaden.
“La cirugía bariátrica debe ser considerada como una prioridad en cada centro asistencial público”
Para ello, solicitan fomentar la formación de especialistas en el tratamiento de la obesidad “en todas las especialidades y profesionales relacionados”: Endocrinólogos, psicólogos, nutricionistas, enfermería y, “por supuesto”, cirugía, reconociendo de esta manera los programas de formación y acreditación de cirugía bariátrica como “oficiales y necesarios para esta práctica”.
Además, exigen las cirugías de remodelación corporal tras la pérdida ponderal como un “servicio dentro de la cartera de servicios de la sanidad pública”. Por último, incluyen el fomento de la investigación en el tratamiento de la obesidad y sus enfermedades asociadas y promover hábitos de vida saludables y la lucha activa contra la obesidad infantil, “aumentando la inversión en la prevención de esta patología”.
"Cada vez son más frecuentes los pacientes que llegan a cirugía con un índice de masa corporal de 50"
El Dr. Amador García Ruiz de Gordejuela fue nombrado recientemente nuevo presidente de SECO. En una entrevista concedida a ConSalud.es, el cirujano presumió del desarrollo y de la “implementación de un programa de formación en cirugía bariátrica específico y bastante pionero” como el mayor logro cosechado por SECO en la última década. “De él se han beneficiado casi 300-400 cirujanos de toda España y también de Latinoamérica”, añadió.
Sin embargo, Ruiz de Gordejuela también señaló un aumento progresivo del índice de masa corporal en España en los últimos años: “Hace 10 años, podían tener una media de IMC de alrededor de 40-43, y ahora cada vez son más frecuentes los pacientes con IMC de 40-45 o incluso 50 que llegan a cirugía”. “La obesidad, al igual que el resto de las patologías, también mata y tiene grandes implicaciones en la calidad de los pacientes”, sentenció.