La escasez de facultativos en el Sistema Nacional de Salud (SNS) es una problemática recurrente que afecta a España. Una realidad que incide en nuestra Sanidad y que además se recrudece durante los meses de verano. Muchos puntos de atención sanitaria de nuestra geografía se encuentran con una alarmante falta de facultativos para cubrir las vacaciones o dar relevo a los efectivos que cada año se jubilan y dejan de ejercer su servicio asistencial al paciente. Ante esto, las soluciones impulsadas por los responsables políticos han pasado por aumentar el número de plazas en las facultades de Medicina e, incluso, prolongar la vida útil de los médicos por medio de la jubilación activa mejorada.
Una serie de medidas de emergencia que hasta la fecha se han mostrado insuficientes para cambiar las tornas de un sistema de salud que se dirige hacia un número de especialistas cada vez más reducido para atender a una población crecientemente envejecida y aquejada de enfermedades crónicas. Para abordar la respuesta que las instituciones implicadas deberían acometer con urgencia ha atendido a ConSalud.es la secretaria técnica de Médicos Jóvenes y MIR de CESM, Sheila Justo, quien traslada una alternativa tan innovadora como que todo médico que “desee ejercer en el Sistema Nacional de Salud y se presente a la convocatoria MIR pueda hacerlo”.
“La situación ha cambiado mucho, la cantidad de graduados que se postulan al MIR no es tan alta como antes en proporción a las vacantes"
Diferentes voces políticas y profesionales han venido en los últimos tiempos demandando al Gobierno central la convocatoria de más plazas de médico residente en las convocatorias anuales. A primera vista, esta propuesta podría resultar lógica en la línea de formar a más profesionales de Medicina para nuestra Sanidad, pero la creación de más plazas MIRno implicaría que no continuasen quedando sin cubrir. “Aunque se aumenten estas plazas sobrarían más. Ahora mismo estamos en una situación en la que si se hubieran ofertado 400 plazas extra durante la última convocatoria, en vez de haber sobrado las 193 actuales habrían sobrado 593”, asevera.
De esta manera, para la facultativa de CESM el foco de atención debería ponerse, más que en los puestos convocados para MIR, en que el número de aspirantes que se presentan anualmente a este examen cada vez es menor. “La situación ha cambiado mucho, la cantidad de graduados que se postulan al MIR no es tan alta como antes en proporción a las vacantes. Sin embargo, el número de plazas sí está aumentando en nuestro país. En 2018 había 2,2 aspirantes por plaza frente a la ratio de 1,5 de este último año”, señala Justo. Algo que no significa que haya menos médicos salidos de la universidad, sino que comienzan a plantearse otras alternativas más allá de acceder al SNS.
“Estamos observando como cada vez más estudiantes se interesan por saber acerca de la posibilidad de formación sanitaria fuera de España"
Aunque en España es obligatorio hacer la especialización para ejercer el sistema público de salud, existen salidas diferentes para los graduados en Medicina. No en vano, es una realidad que se está planteando desde hace algunos años. “Estamos observando como cada vez más estudiantes se interesan por saber acerca de la posibilidad de formación sanitaria fuera de España. Una realidad que otros países europeos están aprovechando”. Fuera de nuestras fronteras, e incluso en el desempeño privado de la profesión, muchos egresados pueden encontrar “mejores condiciones” económicas y laborales que accediendo al MIR para ejercer en la sanidad pública.
Con todo ello, la secretaria técnica de Médicos Jóvenesde CESM traslada que en España “las plazas MIR de las últimas convocatorias más o menos está equiparadas con la cantidad de estudiantes que optan a ellas”. No sería por tanto una cuestión de aumentar significativamente los puestos de la convocatoria, sino de tratar de conformar los recursos futuros que requerirá nuestra Sanidad de la manera más eficiente posible. “La oferta tiene que estar un poco calibrada para las necesidades a largo plazo y de especialidades más deficitarias, como médicos de familia. El propio Ministerio de Sanidad refleja en sus informes que en 2035 contaremos en Españacon 17.000 médicos menos de los necesarios”, alerta la facultativa.
ELIMINAR LA NOTA DE CORTE MIR
La última convocatoria MIR ha dejado plazas sin cubrir en Medicina de Familia y Comunitaria, siendo el primer nivel asistencial un epicentro que sustenta la atención a los pacientes. “Si no hubiera habido una nota de corte, a lo mejor el resto de los profesionales que han quedado fuera hubieran elegido estas plazas desiertas que resultan tan esenciales”, señala la portavoz de CESM. De esta manera, considera que este requisito va en contra de “asegurar el sistema de formación especializada para todos los aspirantes”; una circunstancia que sí se venía recogiendo en nuestro país hasta 2012-2013.
Utilizar la nota del examen MIR para “ordenar las plazas en función de la puntuación e ir cubriendo las plazas hasta que se agotaran”
En base a esta nota de corte se deja fuera a muchos aspirantes que perfectamente podrían entrar a reforzar nuestros servicios de salud. “Cada año perdemos por el camino a muchos efectivos que, ya no sólo es que los vayamos a necesitar, sino que ni siquiera les estamos formando. Aparte de los que terminan marchándose fuera de España”, lamenta Justo. Su apuesta, por tanto, pasaría por únicamente utilizar la nota del examen MIR para “ordenar las plazas en función de la puntuación e ir cubriendo las plazas hasta que se agotaran”. Esto serviría para cubrir ‘de un plumazo’ todas las plazas convocadas.
Eliminar la nota de corte sería una medida rápida y fácil de aplicar para dar respuesta a la necesidad de incorporar a más médicos en el Sistema Nacional de Salud. Sin embargo, habría que acompañarla de otras iniciativas que sirvieran para atraer a más facultativos.“Lo más inmediato es mejorar las condiciones laborales de los médicos del país para que no se vayan e intentar retener así el talento”, remarcala secretaria técnica de Médicos Jóvenes y MIR de CESM, Sheila Justo.