Los complementos de compatibilidad público-privada entre el personal facultativo ha sido una de las principales demandas médicas durante la última oleada de huelgas en España. Se trata de un incentivo económico para compensar la exclusividad de estos profesionales en la sanidad pública, pero que después también han reclamado quienes compaginan su ejercicio con el sector privado, al considerarse 'penalizados'. En este escenario, todas las CC.AA. recogen estos complementos para la totalidad de sus colegiados, salvo Cataluña en el caso de los facultativos que complementan su actividad con la sanidad privada.
El último ejemplo de la adopción de esta medida para equiparar retributivamente a médicos exclusivos de la pública con los que compaginan sectores ha llegado desde Galicia. Esta región ha puesto en marcha esta iniciativa a partir del próximo 1 de enero. Se trataba de una de las principales demandas puestas sobre la mesa de la Consejería de Sanidad por el sindicato médico autonómico para poner fin a la huelga sanitaria vivida recientemente en territorio gallego. Una reivindicación que el presidente de CESM Galicia, Joaquín Marra, aclaraba a ConSalud.es, suponía una “discriminación” para los médicos que deseaban compatibilizar su actividad.
Mientras el médico cumpla con su cometido en el Servicio Catalán de Salud (CatSalut) al mismo nivel que sus compañeros, se justifica que reciba las mismas cuantías
En este punto, Cataluña se ha quedado sola como la única región que no otorga este complemento a los facultativos que se solapan con la sanidad privada. Una circunstancia que, por otra parte, no resulta prioritaria para el vicesecretario general de Metges de Cataluña, David Arribas, quien pone su foco en que este incentivo –se le ponga el nombre que sea- “esté destinado a todo profesional que ejerza su jornada al 100% en el sistema público de salud, independientemente de si luego quiere continuar su actividad en el sector privado”. De esta manera, mientras el médico cumpla con su cometido en el Servicio Catalán de Salud (CatSalut) al mismo nivel que sus compañeros, se justifica que reciba las mismas cuantías.
La estrategia fundamental que desde Metges han puesto sobre la mesa de la Consejería de Salud de la Generalitat –un foro de negociación abierto tras la huelga sanitaria en Cataluña- pasa por priorizar el sistema sanitario público por delante del privado, pues es este primero el que históricamente “mayor eficacia ha demostrado para resolver los problemas de salud de la población y el que mejor servicio ofrece a los pacientes”, asevera el doctor de Medicina de Familia, quien afirma que cada vez “está más claro” que los trabajadores sanitarios “van a optar por trabajar para un solo proveedor” y lo deseable es que desarrollen “el total de la jornada en sanidad pública”.
“Hemos de premiar las personas que están trabajando el 100% de la jornada en el sistema sanitario público, por lo que habría que vincular estos complementos a esa premisa"
Para atraer a los facultativos catalanes a prestar plenamente su actividad en CatSalut habría que desalentarles de hacerlo en la privada. Algo que sólo pasaría por mejorar el atractivo del ejercicio público y sus condiciones laborales. “Hemos de premiar las personas que están trabajando el 100% de la jornada en el sistema sanitario público, por lo que habría que vincular estos complementos a esa premisa. Esto favorecería que pudiéramos combatir el déficit histórico de profesionales y abordar el problema de las listas de espera en Cataluña”, remarca el portavoz de Metges.
De esta manera, si un facultativo trabaja sus 35 horas semanales en la consulta pública –otra de las reivindicaciones en Cataluña- ha de tener la misma recompensa que los demás, independientemente de que después de esas horas un profesional “se vea capacitado” para hacer una consulta o intervenciones quirúrgicas en un centro privado. Por tanto, desde el sindicato médico catalán trasladan al departamento de Manel Balcells la urgencia de desarrollar este complemento incentivador para los colegiados de CatSalut que cumplan este compromiso con su actividad sanitaria pública.
APUESTA PÚBLICA
En la actualidad, todos los servicios de salud autonómicos recogen el ingreso de un complemento de exclusividad para premiar a sus empleados. Sin embargo, este incentivo para los médicos ‘fieles’ que no ‘coquetean’ con el ejercicio privado es muy dispar a lo largo del mapa de España. De esta manera, Cataluña está a la cola en la cuantía de esta retribución, con alrededor de 5.500 euros extra al año. Una cifra que supone la mitad de la otorgada de media en el resto de CC.AA. y que puede alentar a los facultativos a buscar más incentivos en el sector privado.
La solución para el vicesecretario general de Metges, David Arribas, pasa por una apuesta decidida desde la Consejería de Salud de la Generalitat por la sanidad pública y sus profesionales. “La paga por exclusividad es de las menores o la menor del Estado. Nada tentadora. Está fomentando que la gente se busque la vida fuera de la sanidad pública. Es crucial invertir en ella como el mecanismo más eficaz para la salud de los ciudadanos”.