Después de ser respaldada de forma mayoritaria en el Congreso de los Diputados, la Proposición de Ley Orgánica de regulación de la eutanasia se encuentra en el Senado para continuar su tramitación parlamentaria antes de su aprobación definitiva. Pese a que todo indica que la Cámara alta también apoyará esta iniciativa, aún surgen dudas, especialmente entre la oposición y parte del sector sanitario, sobre su aplicación.
Entre los propios profesionales sanitarios también hay opiniones a favor y en contra por la confrontación que existe de compatibilizar esta práctica con el código deontológico y ético de la propia profesión. Sin embargo, también ha surgido un volumen importante de facultativos que se están expresando a favor de que la eutanasia se establezca en España como un nuevo derecho individual.
A través de un escrito, los proponentes recuerdan que la ley garantiza "el respeto a la objeción de conciencia del personal sanitario y su libertad para rechazar una solicitud"
Precisamente en esta semana ha surgido ‘Médicos por la eutanasia’, una iniciativa que consiste en la recogida de firmas de facultativos en apoyo a que la ley salga adelante y que está impulsada por la asociación ‘Derecho a morir dignamente’ de Madrid, principal entidad en defensa de esta propuesta normativa. En el momento de la publicación de esta noticia, la web que recoge los apoyos lleva reunidos a 232 firmantes de toda España.
Junto a la propuesta de recogida de firmas, la iniciativa incluye un alegato en defensa de la eutanasia. En el escrito, se especifica que “ningún médico estará obligado a realizar una eutanasia” y que, según queda reflejado en la ley, se garantiza “el respeto a la objeción de conciencia del personal sanitario y también su libertad para rechazar una solicitud que, de acuerdo con su juicio clínico, no cumpla los requisitos que establece la norma”.
Al mismo tiempo, se insiste en otras indicaciones que recoge la norma, como que “permitirá ayudar a morir a una persona cuya salud se ha deteriorado de forma irreversible, que padece un sufrimiento intolerable y que, de acuerdo con sus valores, hace una petición seria e inequívoca de adelantar su muerte”. Además, resaltan que “debe ser una decisión autónoma, reiterada, libre, después de haber sido informado adecuadamente sobre las diferentes alternativas y posibilidades de actuación, incluido el acceso a los cuidados paliativos y las prestaciones de atención a la dependencia”.
“COMPROMISO” DEL PERSONAL
En el escrito, mencionan que existe “abundante evidencia de que el respaldo social y profesional a la despenalización de la eutanasia es mayoritario, de que los mejores cuidados paliativos no pueden evitar el sufrimiento constante e intolerable en todos los casos y de que la ayuda médica a morir se puede regular con suficientes garantías”.
Los firmantes apuntan que mientras que “más del 80% de médicos y médicas están a favor de su despenalización”, habría “casi un tercio se plantea objetar”
En este sentido, defienden que la experiencia generada en otros países “demuestra que el compromiso del personalsanitario es fundamental para que la eutanasia se convierte en un derecho real”. Para ello, apuntan a unas “encuestas” que indica que mientras que “más del 80% de médicos y médicas están a favor de su despenalización”, habría “casi un tercio se plantea objetar”.
DENUNCIAN UN “USO SECTARIO” DE LA LEY
Para finalizar, en la plataforma se acusa a varias instituciones de estar siendo utilizadas “para difundir un discurso falso contra la eutanasia, con propuestas inconcebibles en un Estado de Derecho”. Desde el punto de vista de estos médicos firmantes, “la confusión de las creencias personales con los objetivos profesionales provoca un uso sectario del Colegio de Médicos que, lejos de ser una defensa de la profesión, deteriora la dignidad y el prestigio social de la medicina”.
De esta forma, los facultativos lanzan un grito de “¡Basta ya!” y piden al conjunto de la profesión a que “abandonen el sectarismo y comprométanse con los fines que les atribuyen sus estatutos y la sociedad democrática”. Así, les invitan a “dar un paso adelante y comprometerse con los derechos al final de la vida regulados democráticamente”.