La Comisión de Salud Pública del Ministerio de Sanidady Consumo aprobó el pasado 7 de diciembre de 2021 la incorporación de los niños de entre 5 y 11 años a a la Estrategia nacional de vacunación frente a la COVID-19.
En España hay censados unos 3,3 millones de niños que se encuentran en esta franja de edad, los cuales constituyen el grupo con mayor incidencia acumulada en casos de Covid-19.
Según exponen desde la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), el análisis epidemiológico de la Covid en la población en dicha franja de edad durante la quinta ola mostró que un 99,7% de los casos detectados presentaron un cuadro leve y la mitad de ellos fueron asintómaticos. estos se trataron de unos síntomas leves, incluso la mitad de ellos asintomáticos. Solo el 0,21% necesitaron hospitalización y el 0,016% requirió ingreso en la UCI pediátrica.
En España hay censados unos 3,3 millones de niños que se encuentran en esta franja de edad, los cuales constituyen el grupo con mayor incidencia acumulada en casos de Covid-19
Debido al inicio de la campaña de vacunación en estos niños, el Comité de Alergia Infantil de la SEAIC ha desarrollado unas recomendaciones para los niños de entre 5 y 11 años con alergias.
Por otra parte, desde la sociedad científica apuntan que en el caso del riesgo de reacciones alérgicas a la vacuna frente a la Covid-19, en el rango de los 12 a los 15 años no hubo informes de situaciones graves, solo de síntomas leves como dolor en la zona de la inyección, cansancio, dolor de cabeza, enrojecimiento de la zona de la inyección y dolor muscular.
RECOMENDACIONES PARA NIÑOS CON ALERGIA
La SEAIC recomienda que todos los pacientes que reciban la vacuna deben ser observados los siguientes 15 minutos, pero el tiempo varía dependiendo de su historial.
En el caso de los que padecen alergia común (pólenes, otras rinoconjuntivitis, alergia a alimentos o alergia a medicamentos entre otras) o historia familiar de alergia grave (anafilaxia) el tiempo será de 30 minutos, y en de los que tengan antecedentes personales de anafilaxia, alergia grave a otras vacunas, mastocitosis u otras enfermedades de los mastocitos hasta los 60 minutos.
La vacuna Comirnaty BNT162b2 (Pfizer/BioNTech) no presenta más contraindicaciones en los niños alérgicos que cualquier otro niño. Como contraindicaciones figuran solamente los pacientes que han sufrido reacciones alérgicas previas a sus componentes o aquellas que hayan presentado una reacción grave con la primera dosis de vacuna frente al coronavirus.
SITUACIONES ESPECIALES
- La alergia a alimentos, aeroalérgenos, venenos de himenópteros o medicamentos, así como los tratamientos con corticoides inhalados para el asma o los corticoides tópicos para la dermatitis atópica, no contraindican la administración de la vacuna frente al SARS-CoV-2.
- Asma moderada, grave no controlada, o crisis de asma. Una vez controlada, el niño ya podría recibir la vacuna.
- El angioedema hereditario y otras formas de angioedema no constituyen un riesgo para presentar un efecto secundario a la vacuna frente al SARS-CoV-2.
- Niños con inmunosupresión u otras alteraciones de la inmunidad. Según FACME, el niño puede recibir la vacuna teniendo en cuenta que es posible que la formación de anticuerpos no sea la óptima. Por tanto, el niño y su entorno deberán mantener las medidas de prevención de manera rigurosa.
- Niños con mastocitosis: se recomienda el pretratamiento con un antihistamínico H1 una hora antes de la administración de la vacuna y la vigilancia posterior en el centro sanitario durante 60 minutos.
- Coadministración con otras vacunas del calendario de vacunación infantil: las vacunas de ARNm frente al SARS-CoV-2 para población infantil se pueden administrar de manera concomitante con cualquier vacuna, en lugares anatómicos diferentes. Si no se administran de forma concomitante, no es necesario esperar ningún intervalo entre las diferentes vacunas. La protección óptima no se obtiene hasta trascurridos 7 días tras la administración de la segunda dosis de la vacuna.
Ante estas recomendaciones, la SEAIC concluye que en los niños que hayan sufrido reacciones alérgicas graves por alimentos o medicamentos, no es necesario realizar de forma sistemática un estudio alergológico con la vacuna frente al SARS-CoV-2 previo a su administración. Y sí, deberá realizarse un estudio alergológico a posteriori en los niños que hayan sufrido reacciones alérgicas con la vacuna frente al SARS-CoV-2.