El curso político, económico y social está cerca de su inicio. Septiembre es un mes de comienzos y, en el ámbito sanitario, no es una excepción. Con la pandemia de la COVID-19 muy presente, motivada por la expansión de la variante Delta y el temor a una sexta ola, ConSalud.es le toma el pulso a Atención Primaria, la puerta de entrada el Sistema Nacional de Salud (SNS).
A día de hoy, explican desde el Foro de la Profesión Médica, el primer nivel asistencial "continúa completamente volcado en la gestión de la pandemia desde el lugar que les corresponde: el eje del sistema sanitario y el nivel asistencial de referencia para las persona que precisan de atención médica, tanto en la atención de patología COVID como en el seguimiento de pacientes crónicos y el abordaje de problemas agudos de salud individuales y comunitarios".
"Una de las asignaturas pendientes que tenemos como sociedad es la atención a los problemas sociosanitarios de una población cada vez más mayor, con más tendencia a la cronicidad y más dependiente"
Y es que, si algo ha quedado patente durante todo este tiempo, es la capacidad de adaptación y el trabajo en equipo que es capaz de desarrollar la Atención Primaria del Sistema Nacional de Salud (SNS). Todo ello, denuncian desde la entidad, "pese a los escasos recursos humanos, estructurales y de autogestión con los que cuenta y cuya mejora viene reivindicando históricamente".
En este sentido, una de las primeras demandas es la recuperación de competencias perdidas y dotar a Atención Primaria de capacidad de promoción de la salud y prevención de la enfermedad, lo que repercutirá en la sociedad del futuro. "Una de las asignaturas pendientes que tenemos como sociedad es la atención a los problemas sociosanitarios de una población cada vez más mayor, con más tendencia a la cronicidad y más dependiente", advierten.
De igual modo, piden adquirir la capacidad de gestión del trabajo diario y del acceso total a las herramientas y recursos sanitarios. Asimismo, apuestan por implantar nuevos sistemas de gestión, bajo direcciones médicas de Primaria en las que participen los profesionales,
Otra de las peticiones es tener un adecuado dimensionamiento, con unos cupos de población óptimos y unos recursos humanos que permitan un plan de respuesta temprana ante, por ejemplo, la aparición de eventos sanitarios críticos como puedan ser picos pandémicos de la pandemia de COVID-19 o cualquier otro evento que pueda surgir.
"Son medidas básicas a tomar para enriquecer y sacar todo el potencial a la Atención Primaria como base para la mejora de la salud futura"
En la misma línea, solicitan la "disminución radical" de la burocracia en las consultas, potenciando aquellas fórmulas de trabajo que han demostrado su valía durante la pandemia, como la telemedicina, la asistencia telefónica, la gestión de la receta electrónica, la informatización de la IT, la comunicación más directa con otros niveles asistenciales…
Todo ello, concluyen, con el objetivo de conseguir un aumento de los tiempos asistenciales en consulta para una asistencia de calidad y un enriquecimiento de la relación médico-paciente. "Son medidas básicas a tomar para enriquecer y sacar todo el potencial a la Atención Primaria como base para la mejora de la salud futura", sentencian.