No son muy conocidas, pero sí muy importantes; tanto, que tienen incluso su propia denominación: infecciones nascomiales. Así es como se conoce a las infecciones que se producen dentro de los hospitales, y que, según datos del Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés), cada año afectan a cerca de cuatro millones de pacientes solo en la Unión Europea. Ahora, un grupo de investigadores de la provincia de Valencia está llevando a cabo un proyecto que tiene como objetivo reducirlas.
Dicho proyecto se llama NOSOSENS, y su investigador principal (IP) es Emilio López Alcina, IP del laboratorio de investigación en Urología (UroLab) de la Fundación de Investigación del Hospital General Universitario de València y jefe de esta misma unidad en la citada institución. “Los sanitarios somos conscientes de que el propio personal o el material que utilizamos puede ser vehículo de infecciones en el ámbito hospitalario, ya sea en quirófano o en las salas de hospitalización. Además, el paciente viene de la calle, y en la calle también hay bacterias, así que todo ese grupito de bacterias que se juntan en los hospitales suelen ser lo mejor de cada casa”, explica el doctor en una entrevista concedida a ConSalud.es.
Desde luego, no es tema baladí: las infecciones nascomiales acaban con la vida de alrededor de 37.000 personas cada año en nuestro continente, ya que dichos microorganismos que se contagian en los hospitales suelen ser resistentes a muchos antibióticos. “Es un problema muy extendido, que vemos en las notificaciones de infecciones nascomiales que salen anualmente. Piensa que nosotros tenemos sistemas de detección mucho más potentes que los de la población general”, apunta por su parte Jesús Fayos, miembro de la Unidad de Calidad y uno de los responsables de detección precoz de este tipo de infecciones en el Hospital General Universitario de València.
"Todo ese grupito de bacterias que se juntan en los hospitales suelen ser lo mejor de cada casa”
Para combatirlos, los hospitales españoles cuentan con cada vez más productos desinfectantes y protocolos de actuación. Así, más allá de las actuaciones de higiene que se siguen en el día a día de los hospitales (lavarse las manos, utilizar ropa especial, no meter objetos de fuera a un quirófano…), estos llevan a cabo, cada mes o dos meses, procedimientos de toma de muestras para su posterior análisis en los laboratorios, que suelen estar disponibles en cuatro o cinco días.
No obstante, insisten los expertos, el trabajo que se realiza actualmente muchas veces no es suficiente. Todo ello, sumado a la resistencia de las bacterias y los hongos a los antibióticos (“si seguimos por este camino, puede llegar a ser un problema de salud pública muy importante dentro de veinte o veinticinco años”) y a los productos químicos que se utilizan para desinfectar los espacios, fue el germen -nunca mejor dicho- que dio inicio a su investigación.
“Como cualquier proyecto de investigación, surge de la necesidad. Por eso, intentamos unirnos con grupos de profesionales y de investigadores que entienden del tema y que nos pueden ayudar a llevar a buen término el proyecto, porque nosotros ni somos químicos ni nos dedicamos a hacer impresión 3D. Estamos en él gente de todos los ámbitos sanitarios, con distintas perspectivas”, señala López Alcina sobre un proyecto que, de hecho, cuenta con la participación de muchas empresas e instituciones de diversa índole.
"Estamos en el proyecto gente de todos los ámbitos sanitarios, con distintas perspectivas”
En concreto, en la ejecución de NOSOSENS, cuya duración es de tres años, colaboran la Assesoria de Gestió i Comunicacions (AGC), la Fundación de Investigación Hospital General Universitario de València (FIHGUV), el Instituto Tecnológico del Plástico (Aimplas) y las empresas Crespo Printing Group y Química Deambla-Rogemar, mientras que la financiación corre a cargo del Instituto Valenciano de Competitividad e Innovación (Ivace+i) a través de la Unión Europea en el marco del programa Comunitat Valenciana FEDER para el periodo 2021-2027.
INVESTIGACIÓN MULTIDISCIPLINAR
Con todos estos nombres sobre la mesa, y sabiendo que participan distintos tipos de profesionales sanitarios, es fácil adivinar que NOSOSENS tiene varias aristas. Entonces, ¿en qué consiste exactamente el proyecto? La investigación pretende sustituir el análisis en los laboratorios por el que hacen biosensores electroquímicos impresos portátiles, que ofrecen una detección y cuantificación inmediata y específica de las bacterias de la familia Staphylococcus aureus -“ya iremos viendo si luego lo podemos ampliar a otro tipo de bacterias”- a la par que permiten monitorizar y gestionar los datos y enviar alertas.
“Es una tecnología muy similar a la de los dispositivos que se utilizan para el control del azúcar, que con una gotita de sangre te hace una lectura del nivel de azúcar que tienes en quince segundos. Lo que pasa es que en este caso estamos mirando la manera de hacerlo más atractivo, funcional, rápido y transportable. Puede estar en cada quirófano o espacio, y con una simple recogida de la superficie a controlar, se pasa por un sensor electroquímico que en unos pocos segundos te hace una lectura. Así, antes de empezar una intervención, los sanitarios ya saben si hay permanencia de estos patógenos en la superficie, y al terminar, pueden hacer lo mismo tomando muestras de los brazos del robot, de los teclados, de los monitores, de las superficies donde se pone la medicación…”, expone López Alcina.
“Ya no estamos hablando solo de un control sistemático, como el que se viene haciendo, sino de adelantarnos y hacer una detección precoz prácticamente entre paciente y paciente"
Junto a ello, en el apartado de la prevención, también contempla la formulación y validación de un nuevo desinfectante sostenible (de origen biológico) para eliminar los principales patógenos en entornos sanitarios. De esta manera, al integrarse con la plataforma de sensores, el sistema optimizará los procesos de desinfección, mejorando la seguridad contra las infecciones adquiridas en el hospital permitiendo el rastreo, control y eliminación rápidos de la colonización de superficies. De momento, el desinfectante se limita a las herramientas y superficies quirúrgicas.
“Ya no estamos hablando solo de un control sistemático, como el que se viene haciendo, sino de adelantarnos y hacer una detección precoz prácticamente entre paciente y paciente, no una vez al mes o cada dos meses”, insiste el experto. Una vez terminada esta investigación de tres años, será el momento de buscar ayuda externa para poder comercializar NOSENS y que la plataforma esté realmente al alcance de los hospitales. “El mejor escenario sería ese, trasladar esto al día a día de los centros sanitarios. En el peor de los casos, habremos conseguido obtener información para mejorar nuestros sistemas de detección rápida. Al final, es una parte que no depende de nosotros, sino de las empresas y del mercado”, sentencia.