La Asamblea General de la Organización Médica Colegial (OMC) ha aprobado por unanimidad en su última reunión un informe sobre sistemas electrónicos de administración de nicotina, instando a que se les aplique la misma normativa nacional e internacional del tabaco. El documento surge a raíz de la campaña publicitaria que está llevando a cabo la empresa Philip Morris Internacional para la promoción y venta de su nuevo dispositivo IQOS para consumo de tabaco.
El doctor Pedro Hidalgo, presidente del Colegio de Médicos de Badajoz, fue el encargado de presentar el citado informe a la Asamblea General. Durante su exposición ha incidido en el peligro que representa la nicotina para la salud humana por su adicción y toxicidad. Es por ello que ha advertido que estos sistemas electrónicos de administración de nicotina "no pueden ser empleados como tratamiento para la deshabituación tabáquica, sino que lo que puede ocasionar es un incremento de consumidores, sobre todo entre los jóvenes y los exfumadores".
"Los sistemas electrónicos de administración de nicotina no pueden ser empleados como tratamiento para la deshabituación tabáquica, sino que lo que puede ocasionar es un incremento de consumidores"
En este sentido, en el informe se constata que no hay pruebas que descarten en los cigarrillos electrónicos y otros dispositivos de administración de nicotina como vaporizadores como el sistema JUUL y el sistema IQOS, las mismas cualidades tóxicas de fumar tabaco quemado en cigarrillo convencional o las adictivas de la nicotina. Además, el uso de nicotina expone a los no fumadores a los efectos negativos para la salud, que de otra manera no estarían expuestos, y puede aumentar la exposición total a la nicotina entre los fumadores.
Se ha comprobado, según este informe, que la concentración de nicotina en plasma del usuario está relacionada con la concentración de nicotina líquida del cigarrillo electrónico. Los fumadores de cigarrillos sin experiencia en estos dispositivos pueden, desde su primer uso, obtener perfiles de administración de nicotina similares a los cigarrillos convencionales.
Es probable que a partir de 2030 el tabaco sea el causante de más de ocho millones de muertes anuales
De ahí la advertencia que se recoge en el citado documento de que mientras no se demuestre lo contrario los cigarrillos electrónicos pueden incitar al consumo de nicotina en adultos y jóvenes no fumadores, así como a la recaída en la dependencia de la nicotina en las personas que consumen a la vez tabaco tradicional y vaporizadores.
En base a las tendencias actuales, es probable que a partir de 2030 el tabaco sea el causante de más de ocho millones de muertes anuales, de las cuales más de las tres cuartas partes se producirán en países de bajos y medianos ingresos.