El Sistema Nacional de Salud (SNS) se enfrenta a un problema de gran calado: la falta de médicos especialistas en los servicios autonómicos. Así lo vienen denunciando las organizaciones sindicales, las sociedades científicas y los colegios profesionales, instituciones que han puesto sobre la mesa la gravedad de esta situación.
En el caso de la especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria (MFyC) la problemática de la falta de facultativos se acentúa. Tanto es así que, según estimaciones de la profesión, en los próximos 10 años se jubilarán en España unos 16.000 facultativos que ejercen sus funciones en Atención Primaria.
Al inconveniente de las jubilaciones hay que sumarle otro: la escasez de profesionales sanitarios que quieran desarrollar sus funciones en las zonas rurales. De hecho, la falta de incentivos para trabajar en este medio ha generado una situación que comienza a preocupar tanto al Ministerio de Sanidad como las consejerías de Sanidad y Salud.
"La atención rural en España atraviesa un déficit crónico, tanto en el campo de las plantillas como de los recursos materiales"
En este sentido, desde las sociedades científicas y colegios de profesionales abogan por hacer más atractivas estas plazas, ofreciendo mejores condiciones laborales e incentivos económicos a los MIR que terminan la especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria.
La situación no es baladí para el funcionamiento óptimo del sistema. Solo con comprobar el número de plazas ofertadas para médicos internos residentes en la edición de 2021 se aprecia cómo Medicina Familiar y Comunitaria ha presentado 2.338 vacantes, esto es, dos de cada 10 plazas ofertadas.
"La atención rural en España atraviesa un déficit crónico, tanto en el campo de las plantillas como de los recursos materiales", explica a ConSalud.es el doctor Juan Ramón Macías, médico rural. "Muchos consultorios rurales adolecen de los equipos más básicos, a lo que se suma la saturada agenda de los profesionales, con citas en localidades separadas por decenas de kilómetros", lamenta.
"Muchos consultorios rurales adolecen de los equipos más básicos, a lo que se suma la saturada agenda de los profesionales, con citas en localidades separadas por decenas de kilómetros"
Otro elemento a tener en consideración, añade, es la edad avanzada de los pacientes. "Por las características de los pacientes encontramos un inmenso porcentaje de patologías crónicas que requieren un seguimiento constante, donde el papel de Enfermería es crucial", expresa.
Y es que, tal y como sostiene Macías, se trata un amplio abanico de enfermedades, como "las cardiovasculares, las autoinmunes o las respiratorias". A todo ello, añade, se suma la atención urgente debido a la lejanía de algunos centros hospitalarios en determinadas provincias de la geografía española.
Por todo ello, reclama a los representantes públicos acciones para revertir la situación: "Demandamos más recursos: la atención rural no puede seguir a la cola de las inversiones autonómicas. Solicitamos incentivos para que los residentes acudan a desarrollar un trabajo que, pese a todo, aporta una gran satisfacción a los profesionales", sentencia el facultativo.