El Grupo Español de Citología Hematológica (GECH), de la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH), ha anunciado la puesta en marcha de un programa de calidad para el mielograma, una prueba que consiste en la evaluación morfológica de una muestra de médula ósea.
Esta prueba, explica el nuevo presidente del GECH y secretario general de la SEHH, José Tomás Navarro Ferrando, "se solicita cuando existen alteraciones en la cantidad y/o aspecto de las células de la sangre (glóbulos rojos, glóbulos blancos o plaquetas) y se desconoce cuál puede ser su causa o se sospechan alteraciones o enfermedades de las células precursoras de la sangre".
Tal y como explica la SEHH, este proyecto se enmarcará en el Programa de Garantía Externa de la Calidad en Hematología de esta sociedad, que “pretende ayudar al laboratorio clínico a mejorar su rendimiento y eficacia, mantener o elevar su credibilidad y reputación, e implantar modelos de calidad y planes de mejora continua”, añade Navarro Ferrando.
El experto ha hecho este anuncio en el marco de la Reunión Interanual del GECH y IX Curso Teórico-Práctico de Diagnóstico Integrado en Hematología, que se ha celebrado recientemente en Madrid, con el objetivo de mostrar a los asistentes “cómo debe hacerse el diagnóstico integrado de las enfermedades hematológicas, desde la tradicional citología (con la observación al microscopio óptico) hasta la más moderna secuenciación de nueva generación”, explica.
Además, como cada año, “se han seleccionado los seis casos citológicos que se presentarán en el próximo Congreso Nacional de Hematología, Hemoterapia, Trombosis y Hemostasia, que tendrá lugar en Barcelona, del 6 al 10 de octubre de 2022, junto con el Congreso de la Sociedad Internacional de Hematología.
La conferencia elegida para esta edición se ha titulado “Síndromes mielodisplásicos (SMD) con sideroblastos en anillo” y ha sido impartido Andrés Jerez Cayuela, del Hospital General Universitario Morales Meseguer (Murcia). Se trata de un tipo muy concreto de cáncer hematológico cuyos eritroblastos (o células precursoras de los hematíes) “contienen depósitos anómalos de hierro que pueden observarse al microscopio con una forma de anillo o de collar de perlas alrededor del núcleo, al hacerse una tinción especial”, afirma el doctor Navarro.
“Desde hace unos pocos años se sabe que el origen de esta anomalía proviene de la mutación del gen SF3B1, con las consecuentes implicaciones que ello tiene en el pronóstico de estos pacientes”, añade. Los SMD son unos cánceres hematológicos que conllevan un riesgo elevado de padecer leucemia mieloide aguda (LMA) y afectan, fundamentalmente, a pacientes de edad avanzada.
Por último, el GECH ha presentado tres trabajos cooperativos de especial relevancia. Por un lado, José María Raya Sánchez, del Hospital Universitario de Canarias, en Santa Cruz de Tenerife, ha identificado las características citológicas de un tipo muy concreto de LMA que cursa con el intercambio de material entre los cromosomas 8 y 21. También es destacable un trabajo liderado por el Servicio de Hematología del ICO Hospital Germans Trias i Pujol, de Badalona (Barcelona), que pretende establecer el valor pronóstico actual de los blastos con bastón de Auer en los SMD.
Finalmente, se ha lanzado la propuesta de hacer un estudio sobre las leucemias congénitas. Por su parte, el Atlas de Citología Hematológica “ya cuenta con cerca de un millar de imágenes, acompañadas todas ellas de su correspondiente información clínicobiológica, según explica Gemma Azaceta Reinares, hematóloga del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa, de Zaragoza, y coordinadora del proyecto.