El Congreso Europeo de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas (ECCMID 2024) ha presentado una nueva investigación este año en Barcelona. El estudio sostiene que las bacterias causantes de la neumonía son comunes en las personas mayores de 60 años y que el contacto con niños en edad preescolar y escolar es el factor más importante en la transmisión de Streptococcus pneumoniae (neumococo) a los mayores.
El neumococo es el principal patógeno bacteriano implicado en infecciones de oídos y de los senos nasales. Además, es una causa importante de enfermedades más graves como la neumonía, la sepsis y la meningitis. Estas infecciones acaban con la vida de casi dos millones de vidas cada año en todo el mundo, afectando sobre todo a niños menores de dos años y a personas mayores.
Tienden a habitar el tracto respiratorio de personas sanas y se transmiten a través de gotitas respiratorias. Aunque las tasas de portación asintomática varían: los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) estiman que están entre el 20% y el 60% de los niños en edad escolar están colonizados. Por otro lado, tan sólo entre el 5% y el 10% de los adultos sin hijos están colonizados.
EL ESTUDIO
La autora principal del estudio, la doctora Anne Wyllie, de la Escuela de Salud Pública de Yale, New Haven, EE. UU, explica que si se produce una transmisión sustancial de neumococo entre adultos, la vacunación de los adultos mayores podría tener el beneficio adicional de reducir la transmisión y la enfermedad potencialmente grave.
Los investigadores llevaron a cabo un estudio longitudinal en New Haven, Connecticut, entre parejas de hogares de 60 años y mayores sin niños que vivan en el hogar. Así, obtuvieron obtener más información sobre la importancia de la transmisión dentro del hogar entre adultos. Entre el otoño y el invierno de los años 2020 hasta el 2022, se registraron un total de 183 adultos en 93 hogares. A través de las muestras de su saliva y datos de cuestionarios sobre comportamientos sociales y salud de los participantes cada dos semanas durante seis visitas en diez semanas.
Para analizar las muestras de saliva se uso la PCR cuantitativa (qPCR) . Así, se pudo detectar la presencia de ADN neumocócico y la diversidad de cepas neumocócicas. Un trabajo anterior del mismo investigador confirmaba que evaluar los hisopos nasofaríngeos de la parte más profunda de la fosa nasal era insuficiente para capturar el estado de porte en adultos. De manera que, el muestreo de saliva se posiciona como un método más efectivo para detectar neumococos.
RESULTADOS Y EDADES
En general, un 4,8% de las muestras dieron positivo para neumococo, con un 15% de los individuos colonizados en al menos una visita de muestreo. Varios dieron positivo por neumococo en múltiples momentos, incluidos dos participantes que fueron colonizados durante el período de muestreo de 10 semanas. Otros dos adultos dieron positivo en cinco de los seis momentos, uno de los cuales informó contacto diario con niños de 2 a 59 meses y de 5 a 9 años. En el 5,4% hogares, ambos miembros eran portadores, aunque no en el mismo momento.
El transporte de neumococo, en cualquier momento de la muestra, fue hasta seis veces mayor entre los adultos mayores que tuvieron contacto con niños diariamente o cada pocos días. Fueron el 10%, en comparación con aquellos que no tuvieron contacto con niños, un 1,6%. Para niños de hasta 1 año (14%), de 1 a 2 años (11%) y de 2 a 5 años (17%).
Quienes tenían contacto con niños a diario o cada pocos días tenían la prevalencia más alta
Aquellos que tuvieron un contacto reciente, dos semanas posteriores, la prevalencia puntual fueron más altos en aquellos que el contacto fue con niños más pequeños. En cuanto a las edades, los que tuvieron contacto reciente con niños menores de cinco años y niños de 5 a 9 años tuvieron prevalencias puntuales, de 14,8% y 14,1%. Y el contacto con niños de 10 años o más, tuvieron una prevalencia puntual del 8,3%.
A pesar de que las cifras eran pequeñas, quienes tenían contacto con niños a diario o cada pocos días tenían la prevalencia más alta (15,7% y 14,0%, respectivamente). Y los que tuvieron un contacto una, dos veces al mes o ningún contacto tuvieron menor prevalencia (4,5% y 1,8% respectivamente).
TRANSMISIÓN ENTRE ADULTOS
"Nuestro estudio no encontró pruebas claras de transmisión de adulto a adulto, a pesar de que hubo hogares en los que un individuo dio positivo para neumococo en numerosos momentos de muestreo, y casos en los que ambos adultos del hogar portaban neumococo aproximadamente al mismo tiempo", recalca Wyllie.
"En cambio, encontramos que la transmisión era mayor entre los adultos mayores que tenían contacto frecuente con niños pequeños. Esto sugiere que el principal beneficio de la vacunación neumocócica en adultos es proteger directamente a los adultos mayores que están expuestos a niños que aún pueden portar y transmitir algunas cepas de neumococo de tipo vacunal a pesar de los exitosos programas nacionales de vacunación infantil".
NEUMOCOCO EN LA PANDEMIA
Cabe destacar que uno de los periodos coincidió con pandemia de COVID-19. Un momento que los autores han querido subrayar por la exploración de los factores de riesgo de portación de neumococo cuando se implementaron medidas estrictas de mitigación de la transmisión que se aliviaron con el tiempo.
Además, las tasas de transporte se mantuvieron constantes en ambas temporadas de estudio, a pesar del regreso a las actividades comunitarias en la segunda temporada y una mayor circulación de virus respiratorios en la comunidad local.
Los autores señalan que los hallazgos se basan en un pequeño estudio comunitario, donde detectaron comparativamente pocos portadores, en una región de Estados Unidos en el que participaron en su mayoría personas blancas con educación superior, lo que podría limitar la generalización de los hallazgos a personas de otras razas o etnias grupos y países.