El Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (Cgcom) ha iniciado medidas legales contra el Ayuntamiento de El Garrobo (Sevilla) ante los acontecimientos ocurridos en dicha localidad, donde el sábado día 24 un grupo de personas "impidieron durante varias horas la salida a la médica de Familia que acababa su guardia" durante una protesta.
Ante este hecho, el Cgcom ha manifestado su "apoyo" y "solidaridad" con la médica tras la coacción sufrida, así como el respaldo al Colegio Oficial de Médicos de Sevilla por sus actuaciones en el mismo sentido. "Mostramos nuestra profunda preocupación por el posible papel que haya podido jugar la institución municipal en canalizar una legítima protesta hacia una acción de retención de un trabajador que había concluido su jornada laboral; e iniciamos las medidas legales encaminadas a una investigación que clarifique si este comportamiento ha existido, si puede suponer un delito de detención ilegal, y, en todo caso, depurar las responsabilidades personales que puedan existir", han apuntado.
"Los médicos, enfermeras y otros trabajadores sanitarios hemos dado ejemplo durante los largos años de austeridad de nuestro compromiso con el servicio público de salud"
En un comunicado oficial también han mostraso su "rechazo más absoluto a que sean los trabajadores sanitarios los que tengan que dar la cara, y sufrir las consecuencias de decisiones de las autoridades sanitarias, con frecuencia ausentes y lejanas de la primera línea de relación con los pacientes y la población".
El Cgcom, han proseguido, lleva ya mucho tiempo advirtiendo a las autoridades sanitarias central y autonómicas de la ausencia de una política de recursos humanos y de una planificación de efectivos; la Atención Primaria y los puestos de trabajo en zonas menos accesibles son el ámbito más vulnerable de este problema. "La profesión médica lleva, también, mucho tiempo ofreciéndose a trabajar y aportar soluciones para reflotar la descapitalización, pérdida de atractividad laboral y desmoralización de los profesionales sanitarios tras la crisis".
"Por el bien de todos, hay que cambiar el rumbo, hay que avanzar en una senda reformista que restaure la confianza y aborde decididamente los problemas que llevan ya mucho tiempo sobre la mesa"
"Los médicos, enfermeras y otros trabajadores sanitarios hemos dado ejemplo durante los largos años de austeridad de nuestro compromiso con el servicio público de salud, y hemos sostenido la atención sanitaria compensando los recortes presupuestarios, los bloqueos de contratación, y la disminución de recursos y servicios. Pero nuestra actitud positiva, fruto de una comprensión amplia y social del juramento hipocrático, no puede tomarse como una excusa para abandonarnos a nuestra suerte, o para exigirnos un nuevo tipo de austeridad autoinfligida", han sostenido.
El Cgcom concluye su nota señalando que "este episodio lamentable de un pueblo sevillano no es más que una muestra de un ramillete creciente de desencuentros entre población y sanitarios que socavan la relación médico-paciente, alimentan la confrontación, generan agresividad, y profundizan la ansiedad y desmoralización de nuestros compañeros de la primera línea de atención sanitaria. Por el bien de todos, hay que cambiar el rumbo, hay que avanzar decididamente en una senda reformista que restaure la confianza y aborde decididamente los problemas que llevan ya mucho tiempo sobre la mesa".