El rechazo a la apertura de nuevas facultades es una de las reivindicaciones históricas por parte del Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM), una posición que de nuevo ha reclamado el colectivo tras conocer a principios de semana que la Agencia Nacional de Acreditación y Calidad (Aneca) ha autorizado la implantación de grado en la Universidad de Alicante para el curso 2019-2020.
Al respecto, el organismo presidido por Alejandro Iñarra Navarro, pide “transparencia y rigor en la aprobación del nuevo grado; la opacidad es una mala costumbre de la Aneca”. Asimismo, El CEEM alega que “la apertura de la facultad de Medicina de la Universidad de Alicante supone un aumento notable del número de estudiantes de Medicina que realizarán prácticas clínicas en los diferentes hospitales de la provincia autorizados para ello, saturándolos”, de forma que “esto causaría una pérdida importante de la calidad asistencial y formativa de los nuevos centros hospitalarios, con unos tutores de prácticas con más estudiantes y unos estudiantes con peores prácticas”.
Además, los estudiantes de Medicina acusan a Manuel Palomar, rector de la Universidad de Alicante, de mentir “descaradamente cuando dice que tienen las infraestructuras y el personal necesario” porque “ninguno de los hospitales en los que dicen que se pueden dar prácticas pueden ser legalmente universitarios, es un escándalo y un engaño mayúsculo”.
“Pedimos a Sanitat y a Educació que paren este despropósito y que no perjudiquen a los estudiantes de Medicina de la Universidad Miguel Hernández”
En este sentido, el colectivo recuerda que el número de facultades de Medicina ha aumentado un 50 por ciento en los últimos diez años, lo que tiene consecuencias negativas para la profesión porque la cifra de graduados no se ajusta con la disponibilidad de las plazas MIR, lo que lleva a que muchos médicos tengan que salir fuera de España en busca de oportunidades.
“A ello, se suma la desviación perniciosa de recursos y profesorado en la creación de nuevas facultades cuando en las actuales, tal y como expone la Conferencia Nacional de Decanos de las Facultades de Medicina, la falta de profesorado es ya alarmante”, añaden.
La última palabra para que la implantación del grado siga adelante la tienen las consejerías de Educación y Sanidad de la Comunidad Valenciana. “Pedimos a Sanitat y a Educació que paren este despropósito y que no perjudiquen a los estudiantes de Medicina de la Universidad Miguel Hernández”, instan desde el CEEM a la consejera de Sanidad, Ana Barceló.
EL FUTURO GRADO
Según informa la Universidad de Alicante, el plan de estudios prevé 75 plazas y constará de 360 créditos, en seis cursos académicos. Durante los dos primeros años, los estudiantes recibirán formación básica para poder afrontar la formación clínica durante los cursos de tercero a quinto, para acabar en sexto curso dedicados a prácticas clínicas y al trabajo de fin de grado.
Además, en las asignaturas optativas incluyen Biología de la Reproducción Humana, Medicina Molecular, Psicoterapia Comportamental y Salud, Emergencias y Catástrofes y Nutrición Clínica.