La Medicina del Deporte se enfrenta a una posible desaparición, algo que supondría un agravio muy importante para la mayor parte de los deportistas “tanto de alto nivel como población general”, ya que se verían privados de los servicios y trabajos que realizan los especialistas de esta disciplina. Así lo alerta la Sociedad Española de Medicina del Deporte en las peticiones que le hace al nuevo Gobierno -a través de ConSalud.es- de cara a las elecciones del próximo 23 de junio.
De esta manera, SEMED recuerda que la suya es una especialidad “con un amplísimo ámbito de actuación”, ya que no se limita solo al deporte de competición, sino que también incluye al deporte aficionado y de tiempo libre. De hecho, según la última encuesta de hábitos deportivos de la que se hacen eco, el 40% de la población española de entre 15 y 75 años practica algún tipo de deporte, lo que convierte a nuestro país en una “potencia mundial del deporte” que “requiere de la aportación de la Medicina del Deporte para mantener esta situación”.
Pero Medicina del Deporte es una especialidad minoritaria en España, con pocos profesionales trabajando en ella. Además, señala la mencionada Sociedad Española de Medicina del Deporte, tiene una distribución geográfica desigual -concentrada especialmente en Andalucía, Cataluña y Madrid- y se encuentra fuera del Sistema Nacional de Salud, ligada al ámbito privado -como clubs deportivos- y a las consejerías y concejalías de deportes de comunidades autónomas y de ayuntamientos, respectivamente.
"La Medicina del Deporte tiene un amplísimo ámbito de actuación, no se limita solo al deporte de competición"
En cuanto a la formación -principal causa que podría llevar a la mencionada desaparición de la especialidad-, al estar fuera del Sistema Nacional de Salud, esta se realizaba en las escuelas profesionales de Medicina del Deporte, “a pesar de que la confluencia europea determinó que la formación especializada debería hacerse por la vía de acceso MIR y mediante formación hospitalaria en régimen de dedicación plena en las correspondientes unidades docentes”. “Es el único sistema que garantiza una formación de calidad”, reivindica SEMED.
Sin embargo, desde el año 2018, Medicina del Deporte ni tan siquiera se imparte en las escuelas profesionales, por lo que ya no salen nuevos especialistas y la tasa de jubilación es por ende muy alta. SEMED critica que el nuevo Real Decreto de Especialidades 589/2022 no tiene en cuenta los condicionantes de la Medicina del Deporte -“que la diferencian de la mayor parte de las especialidades”- mencionados en el tercer párrafo, “especialmente en el apartado que exige que al menos siete Consejerías de Salud de 7 comunidades autónomas se comprometan a financiar la formación de especialistas”. “Existen comunidades autónomas que ya sean comprometido a la financiación de los MIR pero sin alcanzar las siete que exige el RD de Especialidades”, indican.
Desde la Sociedad presidida por Miguel Enrique del Valle Soto han mantenido reuniones con los responsables actuales de la Dirección General de Ordenación Profesional, en las que lamentan “observar indiferencia y en algún momento cierta hostilidad, cosa que no ocurría con anteriores responsables del Ministerio de anteriores Gobiernos y de este mismo Gobierno en la actual legislatura”. “Siempre indican que se debe de cumplir con todos los puntos del RD de Especialidades sin excepciones (financiación por al menos siete comunidades autónomas), lo que en la práctica nos resulta casi imposible por las características de la especialidad ya comentadas”, denuncian.
"En las últimas reuniones hemos observado indiferencia y cierta hostilidad"
Es por ello que la principal reivindicación al nuevo Gobierno de España por parte de la Sociedad Española de Medicina del Deporte es precisamente la adaptación del Real Decreto de Especialidades a la realidad de su especialidad, “para que en el menor tiempo posible se restablezca la formación vía MIR de la Especialidad de Medicina del Deporte”. “Al Ministerio de Sanidad no le supondría prácticamente coste alguno, ya que la financiación corre a cargo de las comunidades autónomas que están interesadas en la formación de MIR de Medicina del Deporte”, subrayan.
Esta posible desaparición por falta de especialistas desde el año 2018 afectaría especialmente, afirman, a la población general -jóvenes tanto escolares como deportistas de proyección o personas adultas y ancianas con alta dedicación a actividades físico-deportistas-, que se verían privados de la asistencia de los profesionales en Medicina del Deporte. “Los deportistas profesionales y de alto nivel posiblemente contarían, aunque con dificultades, con médicos con una formación específica”, matizan.
Con respecto a esto, recuerda SEMED, la aportación de la Medicina del Deporte se resume en dos grandes puntos: Por un lado, el tratamiento de las lesiones deportivas con elementos diferenciadores de enorme interés “como son el conocimiento profundo de las lesiones de partes blandas, la atención inmediata y continuada que proporciona el especialista y la visión específica de la lesión deportiva”; por otro, “la aplicación de la fisiología del esfuerzo y de la valoración funcional para optimizar el entrenamiento y mejorar el rendimiento”.
"La desaparición de la especialidad de Medicina del Deporte también dejaría a los deportistas desprotegidos frente a diversos aspectos del dopaje"
“La desaparición de la especialidad de Medicina del Deporte también dejaría a los deportistas desprotegidos frente a diversos aspectos del dopaje. El más importante sería que ante la necesidad de tratamiento por cualquier proceso patológico, el deportista sería tratado por su médico generalista o especialista, quien prescribiría medicación sin tomar en consideración las limitaciones que supone el dopaje respecto a las sustancias prohibidas y en las condiciones especiales de autorización de uso de algunos medicamentos que requieren un procedimiento de autorización que si no se realiza supone la sanción del deportista”, inciden.
La segunda reivindicación de SEMED es la obligatoriedad, por parte de las Administraciones Públicas, “de los Reconocimientos Médicos de Aptitud Deportiva, previa a la práctica deportiva, para la prevención de la Muerte Súbita en el Deporte”. “Este tema está muy avanzado en cuanto a su realización técnica y con un amplio consenso profesional y deportivo con el Consejo Superior de Deportes (CSD), pero su regulación y aprobación nunca ven la luz”, añaden.
“Creemos que el nuevo Gobierno y en este caso los responsables de Deportes, actualmente Ministerio de Cultura y Deporte y CSD, deben asumir esa responsabilidad y regular la realización de Reconocimientos de Aptitud para la prevención de la muerte súbita en el deporte de forma valiente y decidida, teniendo en cuenta que no supone un coste económico para el Gobierno y que los beneficios están plenamente constatados en los países de nuestro entorno en los que han sido implementados”, sentencian.