Los mosquitos son responsables de la muerte de entre 750.000 y 1 millón de personas cada año, según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS). El mosquito no mata directamente, sino que es un vector de enfermedades: un organismo vivo que puede transmitir patógenos infecciosos entre personas, o de animales a personas. Pero además de las implicaciones sobre la salud humana, la actividad de los mosquitos tiene consecuencias económicas.
“Las investigaciones apuntan a que si hace menos frío durante el invierno, los mosquitos están activos durante más tiempo”, afirma el investigador de la EBD-CSIC, Jordi Figuerola, en declaraciones a ConSalud.es. “Un mayor número de mosquitos sobreviven al invierno”, entre los que se incluyen los que están infectados por diferentes virus. A su vez, estos vectores “empiezan a reproducirse antes y dejan de reproducirse más tarde, por lo que el período de actividad de los mosquitos se está alargando”, añade el experto.
“Si hace menos frío durante el invierno los mosquitos están activos durante más tiempo”
“Esta situación la estamos viendo en los últimos años y los modelos que nos llegan desde la Agencia Estatal de Meteorología que analizan la proyección de la climatología sugieren que este proceso va a continuar”, apunta Figuerola, quien señala que “en el futuro nos esperan inviernos cada vez más suaves por lo que los mosquitos van a estar más activos”.
“Los mosquitos son una fuente de molestias”, asevera el investigador. “Las picaduras pueden provocar reacciones alérgicas y son los animales en el mundo que matan a más humanos debido a las enfermedades que transmiten, principalmente la malaria”, advierte.
Un estudio reciente coordinado por investigadores de la Estación Biológica de Doñana (CSIC), el Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) y el Área de Epidemiología y Salud Pública (CIBERESP) del Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER-ISCIII) ha analizado la distribución del principal mosquito transmisor de la malaria presente en España. La investigación pone de manifiesto que el mosquito 'Anopheles maculipennis' está ampliamente distribuido en España, con una especial predilección por desembocaduras y valles de ríos con zonas de cultivo de regadío.
“En España la enfermedad más transmitida por los mosquitos es el Virus del Nilo”
“Aunque el riesgo de transmisión local es muy bajo, estos modelos son útiles para identificar las zonas con un mayor riesgo de transmisión local, y es necesario seguir medidas profilácticas cuando se viaje a países donde la malaria es endémica”, explica Figuerola.
Estos mosquitos están presentes en más de 3.000 localidades en la Península y Baleares. Sólo el 15% de los casos de malaria que cada año se detectan en España se relaciona con especies de malaria que podrían ser transmitidas eficazmente por el mosquito. En total cada año en nuestro país se registran entre 700 y 850 casos de malaria importada. Figuerola recuerda que “en España la enfermedad más transmitida por estos vectores es el virus del Nilo”.
LA REPERCUSIÓN ECONÓMICA DE LOS MOSQUITOS
Figuerola explica que además de la afección a la salud humana “los mosquitos transmiten también una serie de virus que producen un impacto muy negativo en la economía”. Recuerda que algunas de las enfermedades que transmiten los mosquitos afectan al ganado y eso tiene repercusiones importantes en diferentes sectores económicos.
En España, el control de los mosquitos es responsabilidad municipal, depende de los ayuntamientos. El experto recuerda que recientemente la Junta de Andalucía ha aprobado un plan de control de vectores que clasifica los municipios según su riesgo de casos de virus del Nilo y en función de ese riesgo se deben realizar una serie de actividades de prevención incluido el hecho de tener un plan de control de vectores de obligada aplicación.
“Los mosquitos también transmiten una serie de virus que producen un impacto muy negativo en la economía”
Destaca que en nuestro país uno de los sistemas de control de mosquitos que mejor funciona es el de la Diputación de Huelva: “Este Plan da servicio a muchos municipios. Hay que tener en cuenta que un ayuntamiento grande no tiene problemas, pero uno más pequeño puede encontrarse con más dificultades para abordar este problema. En este caso la Diputación paga el 80% del coste del servicio y el Ayuntamiento el 20% restante”.
El seguimiento periódico de las poblaciones de estos vectores en puntos estratégicos de las zonas consideradas de riesgo permite conseguir la detección temprana del aumento de la densidad de mosquitos transmisores y la circulación del virus en los mosquitos para informar a la Administración local, para que puedan tomarse las acciones de vigilancia, control y comunicación en su territorio pertinentes que disminuyan las probabilidades de transmisión a humanos.