A finales de 2016, los 1,6 millones de ocupados en Sanidad eran ya un 21,8% superior a los existentes al principio de la crisis
De esta forma, a finales de 2016, los 1,6 millones de ocupados en Sanidad eran ya un 21,8% superior a los existentes al principio de la crisis. Sin embargo, en este balance positivo juegan un diferente papel la sanidad privada y la pública.Así, mientras que el número de asalariados en el sector privado ha aumentado un 39,2% desde el inicio de la crisis (a finales de 2016 había 209.000 trabajadores más que a finales de 2007), este incremento apenas es de un 6,2% en el sector público. De hecho, según el informe, en este período incluso ha crecido más el número de trabajadores no asalariados (autónomos, empresarios individuales o trabajadores independientes), que ha crecido de 70.000 personas a 97.000 (un 39,4%).
Las diferencias, además, fueron más acuciadas durante los años centrales de la crisis (entre 2007 y 2014), en los que el número de asalariados en la sanidad pública sólo creció un 0,3% (apenas dos mil empleados más), mientras que en el sector privado aumentaron un 15,5%. Sin embargo, el informe también revela que, una vez pasado este período, el crecimiento tiende a igualarse, de forma que entre 2015 y 2016 el sector privado ganó un 9,7% de asalariados, mientras que el público creció un 2,7%.
A nivel porcentual, no obstante, la dinámica de la época de crisis refleja un aumento de la importancia de la sanidad privada como creadora de empleo en el sector sanitario, ya que ha pasado de contar con el41,7% del total de asalariados en la Sanidad a emplear al 47,7% de los trabajadores del sector.
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