La prescripción enfermera no “usurpa” ninguna competencia de los médicos

Tras años de lucha, los enfermeros podrán prescribir medicamentos en cuestión de unas semanas, cuando se apruebe el Real Decreto de uso y autorización de medicamentos y productos sanitarios por parte del personal enfermero. La medida, sin embargo, no es apoyada por los médicos, que hace meses denunciaron "los riesgos de su incorrecta utilización con el consiguiente coste en salud y recursos", como expuso el Consejo de Colegios de Médicos.

En este sentido, desde el Consejo General de Enfermería (CGE) explican que la prescripción enfermera “no usurpa ninguna competencia de los médicos”, como indica a Consalud.es José Luis Cobos, asesor de la organización colegial.Aunque el proceso de dispensación de medicamentos se hará de manera similar al de los médicos, especialmente en casos de Atención Primaria (emiten la receta y el paciente adquiere el producto en una farmacia), los enfermeros lo harán exclusivamente “en el ámbito de sus competencias y ejercicio profesional”.

En concreto, los enfermeros sólo podrán prescribir o aplicar medicamentos que no necesiten receta, productos sanitarios (como apósitos, compresas, etc.) y determinados fármacos que sí requieren prescripción médica, pero los cuáles tendrán que ser autorizados mediante comisiones en las que participarán médicos, consejeros de Sanidad autonómicos, enfermeros y miembros del Ministerio de Sanidad. Si bien, Cobos insiste en que estas prescripciones se limitarán al ámbito de actuación del enfermero, a su “día a día”.

Para explicar por qué la prescripción enfermera no supone realizar tareas que requieran conocimientos propios de los médicos, el portavoz del CGE pone un ejemplo clarificador: “Si necesito cuidar a un paciente con una ostomía, por ejemplo, éste necesita unos dispositivos, unas bolsas. Hoy día, los enfermeros no pueden, legalmente, decirle al paciente que vaya a la farmacia y las adquiera. Tiene que avisar al médico para que le haga la receta, suponiendo un trámite innecesario tanto para el paciente como para el enfermero y el propio médico. El Real Decreto permitirá al enfermero prescribirlo directamente”, señala el especialista.

Estas decisiones, según la CGE, ya la toman los enfermeros habitualmente, pero con la normativa las prácticas estarán amparadas jurídicamente. “No pretendemos por tanto hacer de médicos, sino ayudarlos en cierto modo, eliminando trámites burocráticos. Además, los informes del Consejo de Estado ya aclaran que no se usurpan las competencias de los médicos”.

A FALTA DE LA APROBACIÓN

Aunque desde Sanidad aseguraron hace dos semanas a los representantes de la Mesa Sectorial (formada por el CGE y el sindicato Satse) que el Real Decreto de prescripción enfermera se aprobaría “en una o dos semanas”, pasado ese plazo, el Ejecutivo aún no se ha pronunciado al respecto en Consejo de Ministros, aunque desde la CGE confían en que se apruebe próximamente.

Una vez aprobado, los enfermeros que quieran prescribir medicamentos tendrán que pedir una certificación a Sanidad. Para ello, deberán contar previamente con una formación específica, que los capacite para poder dispensar fármacos.

José Luis Cobos estima que, de los 270.000 enfermeros que hay en España, aproximadamente 140.000, casi un 50%, ya cuentan con esas competencias necesarias. “Esta formación ya se incluye en los planes universitarios, y para los diplomados, ofrecemos cursos gratuitos en los colegios de Enfermería de todo el país”, concluye.


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