La jubilación demorada se ha convertido en una interesante herramienta para retrasar el retiro de muchos médicos del Sistema Nacional de Salud, de por sí necesitado de más efectivos en plantilla capaces de dar relevo a quienes se jubilan y cubrir la asistencia a un grueso de pacientes cada vez más grande y envejecido. A diferencia de la jubilación activa mejorada, que incluye únicamente a Médicos de Familia y Pediatras, la demorada puede ser solicitada por cualquier facultativo interesado en trabajar unos años más en su puesto.
En este sentido, el Centro de Estudios del Sindicato Médico de Granada, de la mano de su coordinador Vicente Matas, ha desvelado un nuevo informe sobre la situación actual en nuestro país de la jubilación demorada, aclarando que se trata de una herramienta que puede servir para paliar la pérdida de poder adquisitivo con relación al sueldo en activo de los facultativos -debido al tope máximo de la pensión a la que han contribuido-, que supera el 35% en casi todos los casos y el 50% para los que continúan haciendo guardias.
Este porcentaje se concede por cada año completo cotizado, o que se considere legalmente cotizado, entre la fecha en que cumplió dicha edad y la del hecho causante de la pensión
La sexta oleada de la Encuesta OMC-CESM sobre la Profesión Médica de diciembre de 2019 reflejó que el 32,6% de los médicos en activo mayores de 55 años estarían dispuestos a prolongar su actividad laboral, mientras que solo un 13,7% tenían intención de adelantar su jubilación y el 39,6% tenían intención de jubilarse cuando les correspondiera por la edad. Unas cifras, aclara el documento, que “después del deterioro de las condiciones laborales tras la pandemia podrían haber variado, pero “muestran el interés por prolongar su vida en activo de muchos compañeros”.
El Ministerio de Inclusión y Seguridad Social y el Ministerio de Sanidad, informan que el promedio de jubilación de los médicos de AP entre 2019 y 2022 es el siguiente: Con 63 años se jubilaron el 10%, con 64 años el 8%, con 65 años el 41%, con 66 años el 24%, con 67 años el 8%, con 68 años el 4%, con 69 años el 1% y con 70 años 4%. Unos porcentajes que, según el Sindicato Médico de Granada, se irán incrementando sobre todo en 66 y 67 años, pues la mencionada edad legal para jubilarse va aumentando hasta llegar a los 67 si no se tiene el número de años requerido para la jubilación ordinaria a los 65 años.
¿CÓMO FUNCIONA?
Los médicos que decidan atrasar su edad de jubilación perciben, desde el 1 de enero de 2022, un porcentaje adicional a su pensión (siempre que al cumplir la edad de jubilación vigente en cada momento hubieran reunido el período mínimo de cotización exigido y no tener 70 años o más). Este porcentaje se concede por cada año completo cotizado, o que se considere legalmente cotizado, entre la fecha en que cumplió dicha edad y la del hecho causante de la pensión. El complemento tras la jubilación demorada le puede llegar de tres formas distintas, a su elección:
1. Un porcentaje adicional del 4% por cada año completo cotizado después de cumplir la edad ordinaria de jubilación, lo que supondrá un aumento de la cuantía de la pensión. Hasta el año 2022 el incentivo oscilaba entre un 2 y un 4 por ciento de mejora, según el tiempo cotizado.
2. Una cantidad a tanto alzado por año cotizado, que va a depender de los años que se haya cotizado cuando se llega a la edad de jubilación, y que va desde los 5.000 a los 12.000 euros aproximadamente. Se recibe en el momento de la jubilación. No es recomendable en general, pues con poco más de siete años cobrando el incremento mensual, el importe es mayor y la cuota para hacienda mucho menor, pues al cobrarlo completo el año de la jubilación supone un importante incremento en el IRPF y al médico llega poco más del 50% del importe bruto.
3. Una combinación de ambas. En principio tampoco recomendable de forma general, aunque depende de la situación de cada médico y es una decisión personal.
La conclusión desprendida del informe de la organización colegial granadina refleja que el incentivo para la demora, aunque se ha incrementado, resulta todavía insuficiente
Este tipo de jubilación es incompatible con otras modalidades como la activa, la flexible o, lógicamente, la anticipada. Contando con esto, el simulador de jubilación disponible en el portal “Tu Seguridad Social”, permite hacer una estimación de la pensión de jubilación que corresponderá a cada médico en función de los datos laborales actuales.
“INCENTIVO INSUFICIENTE”
La conclusión desprendida del informe de la organización colegial granadina refleja que el incentivo para la demora, aunque se ha incrementado, resulta todavía insuficiente. En este sentido, aclaran, presenta importantes ventajas para la Seguridad Social, teniendo en cuenta que “la penalización por la jubilación anticipada es del 21% para dos años, con el 8% por una demora de dos años, y también si vemos que para la Seguridad Social cada año de demora le supone un ahorro de más de 46.000 euros de pensión y un ingreso por las cotizaciones de casi 17.000 euros -entre empresa y trabajador-“.
Es “muy beneficioso para Hacienda”, que sigue ingresando un año más unos impuestos muy superiores, al estar el médico en activo, y “para el SNS” que puede tener un tiempo más, unos profesionales de gran experiencia
En esta línea, prosiguen, también es “muy beneficioso para Hacienda”, que sigue ingresando un año más unos impuestos muy superiores, al estar el médico en activo, y “para el SNS” que puede tener un tiempo más, unos profesionales de gran experiencia, especialmente en especialidades sin médicos para reponer las jubilaciones. “Un poco más de generosidad por parte de la Seguridad Social beneficiaría a todos, incluida la Seguridad Social”, concluye el Sindicato Médico de Granada.