El linfoma cutáneo de células T (LCCT) puede tener un profundo impacto en la calidad de vida relacionada con la salud y el bienestar psicológico de los pacientes. Las alteraciones en la piel y el picor provocan depresión, trastorno en el sueño y fatiga. Los LCCT representan alrededor del 4% de todos los casos de linfomas no Hodgkin y hasta el 80% de todos los linfomas cutáneos primarios. Afectan a cerca de 240 personas por cada millón en Europa. La micosis fungoide (MF) y el síndrome de Sézary (SS) representan aproximadamente el 60% y el 5% de los LCCT, respectivamente
Ante esta situación los doctores Raúl Córdoba y María Rodríguez Pinilla, coordinador de la Unidad de Linfomas del Servicio de Hematología y especialista del Servicio de Anatomía Patológica, respectivamente, de la Fundación Jiménez Díaz han organizado el 4º curso 'Actualización en Linfomas Cutáneos' donde más de 25 ponentes de ámbito nacional e internacional abordaron las últimas novedades en torno a los linfomas cutáneos en un foro multidisciplinar que reunió a patólogos, dermatólogos y hematólogos. "El objetivo docente de este curso es la discusión de casos y el abordaje multidisciplinar de los linfomas cutáneos, donde podamos oír todas las voces y opiniones de los asistentes, y enriquecer tanto el diagnóstico como el tratamiento de cada caso”, explica el doctor Córdoba.
"El objetivo docente de este curso es la discusión de casos y el abordaje multidisciplinar de los linfomas cutáneos, donde podamos oír todas las voces y opiniones de los asistentes"
"Los linfomas cutáneos, especialmente los linfomas cutáneos de células T, son enfermedades con una incidencia muy baja, de ahí que sean pocos los casos de nuevos diagnósticos que tenemos a lo largo del año", afirma el doctor Raúl Córdoba quien añade que "es por ello que han ido surgiendo iniciativas como la de proponer la creación de un CSUR (centros, servicios y unidades de referencia) para que los hospitales puedan remitir a los pacientes a los centros de referencia dentro del Sistema Nacional de Salud".
Entre las principales novedades de la cuarta edición de este foro multidisciplinar cabe destacar el mayor número de casos clínicos debatidos, el envío de comunicaciones presentadas en formato de póster o de comunicación oral, y el abordaje del uso de nuevas terapias innovadoras. "Es importante conocer lo que está por venir, y difundir los ensayos clínicos en los que estamos participando para que más pacientes puedan ser derivados y se beneficien de las nuevas terapias", comenta el coordinador de la Unidad de Linfomas.
"En la Fundación Jiménez Díaz entendemos que estas enfermedades precisan de un abordaje multidisciplinar, no solo en el momento del diagnóstico, sino también en el tratamiento y seguimiento, y así lo hemos implementado en la Consulta de Linfomas Cutáneos con la que contamos en el instituto oncológico del hospital, OncoHealth".
EL FUTURO DE LA INVESTIGACIÓN EN LOS LINFOMAS CUTÁNEOS
La investigación de los linfomas cutáneos de células T va encaminada a abandonar la quimioterapia y buscar nuevas estrategias de tratamiento. "En este momento disponemos de opciones de tratamiento de inmunoterapia, que son anticuerpos monoclonales dirigidos contra las células tumorales, como mogamulizumab, dirigido contra la molécula CCR4. Este fármaco está aprobado en España y financiado por el Sistema Nacional de Salud para algunos tipos de linfomas cutáneos de células T y siempre que cumplan con unos requisitos concretos de presentación", comenta el Dr. Córdoba. "El futuro será poder aumentar los tipos de pacientes que se puedan beneficiar de estos tratamientos y explorar estrategias de combinación con nuevos fármacos", concluye el experto.