Un equipo de investigadores de la Universidad de Ciencias de Tokio ha propuesto un material médico innovador y de gran valor añadido para el tratamiento de heridas en la piel, el órgano más grande del cuerpo. A medida que pasan los años, esta se vuelve más frágil y no puede curarse ante cortes, rasguños, infecciones y úlceras. Por ello, ante un claro panorama marcado por el envejecimiento de la población, la demanda de tratamientos para este tipo de heridas en la piel ha crecido.
En las últimas décadas, los hidrogeles han recibido mucha atención e inversión, ya que cuando se aplican sobre una lesión, absorben los líquidos descargados o exudados y mantienen la herida protegida, bien hidratada y oxigenada.
"Hemos demostrado que nuestro hidrogel tiene un alto efecto terapéutico y al mismo tiempo puede suprimir la expansión temporal del área de la herida causada por preparaciones clínicas convencionales"
Sin embargo, los investigadores apuntan que la mayoría de estos productos cuentan con propiedades adhesivas al tejido de la piel, lo que provoca que sean tan pegajosos que acaben estirando y expandiendo la herida una vez que se hincha tras absorber los exudados. Esto causa dolor al propio paciente y también aumenta el riesgo de infección bacteriana debido al crecimiento del área de la herida.
En este contexto, los investigadores japoneses han publicado en el International Journal of Biological Macromolecules los resultados de su novedoso hidrogel de bajo coste que contiene un componente que se encuentra en las algas marinas, logrando una serie de propiedades físicas completamente diferentes a los mencionados hidrogeles convencionales.
En concreto, el estudio ha contado con la dirección del Sr. Ryota Teshima, estudiante de maestría en TUS, el profesor asistente Shigehito Osawa, la Sra. Miki Yoshikawa, el profesor asociado Yayoi Kawano, el profesor Hidenori Otsuka y el profesor Takehisa Hanawa, todos de diferentes facultades y departamentos de TUS.
En cuanto al método de preparación, los autores señalan que se elaboró con carbonato de calcio y agua carbonatada, también conocida como agua con gas. La propiedad clave de esta sustancia que se encuentra en las algas es que no se adhiere agresivamente a las células ni a los tejidos de la piel. Gracias a su estructura formada por iones de alginato y calcio, además del efecto protector del CO 2 en el agua con gas, el hidrogel resultante no sólo exhibió condiciones ideales de pH y humedad para la recuperación de la herida, sino que también demostró una adhesión e hinchazón significativamente menor en los cultivos celulares y el modelo de ratón.
"Los materiales médicos todavía carecen de una perspectiva orientada a la sostenibilidad y creemos que esta investigación servirá como punto de referencia para el diseño de futuros materiales médicos"
"A través de experimentos con animales hemos demostrado que nuestro hidrogel tiene un alto efecto terapéutico y al mismo tiempo puede suprimir la expansión temporal del área de la herida causada por preparaciones clínicas convencionales. Esto demuestra nuestra hipótesis inicial de que los geles con baja adherencia a la piel y propiedades de baja hinchazón son excelentes como materiales para apósitos para heridas, lo cual es todo lo contrario de la sabiduría convencional", aclaró el Sr. Teshima.
Junto con todas estas ventajas que ofrece el hidrogel de los investigadores nipones, cabe señalar sus propiedades sostenibles, ya que gracias al alginato que se extrae de las algas, y que se consideraba un desecho hasta ahora, es biodegradable. "Los materiales médicos todavía carecen de una perspectiva orientada a la sostenibilidad y creemos que esta investigación servirá como punto de referencia para el diseño de futuros materiales médicos y conducirá a un cuidado de heridas sostenible y de bajo coste. Además, nuestros hallazgos pueden ayudar a aclarar problemas con las formulaciones de hidrogel actualmente en uso clínico y proporcionar nuevas pautas de diseño”, concluye Teshima.